Opinión

Lo de Darder al Barça y Joselu al Madrid

Sergi Darder celebra un gol con el Espanyol

Sergi Darder celebra un gol con el Espanyol / Carlos Mira

Al mismo tiempo que el Madrid ficha a Joselu, salta la noticia del interés del Barça por Darder. Son dos operaciones de mínimos, tratándose de los dos equipos más poderosos del fútbol español y de dos jugadores que no están entre los más cotizados del mercado de elite. Dos operaciones que certifican la crisis del fútbol español, que Madrid y Barça ya no cortan el bacalao en el nuevo negocio del fútbol.

Cuesta creer: el Barça y el Madrid fichando a suplentes, porque no nos engañemos, Joselu no será titular en el equipo de Ancelotti como Darder no lo sería en el de Xavi. Son jugadores de relleno, para las rotaciones, para dar descanso a las figuras, pero no saldrán en las fotos de las grandes ocasiones, clásicos, partidos de Champions trascendentales o aquellos en los que se decidan títulos. Jugadores para la Copa, y no toda la Copa. Jugadores que, eso sí, dan mejores opciones a los entrenadores, pues Joselu mejora a Mariano y Darder seguramente mejoraría a Sergi Roberto, pongamos por caso. Pero para mucho más no creo que alcance la cosa.

CUESTIÓN ECONÓMICA

Es evidente que son dos operaciones económicas. Lo de Joselu es increíble. Un cedido del Espanyol, de 33 años, que acaba de bajar, y medio milloncete de caridad para que no se diga. Con el añadido, para más inri, de que parece, solo parece, que ya no van a fichar más, de que ya se conforman con Joselu por Benzema. Todo para ahorrar y seguir soñando otro año con Mbappé, el tipo que ya les apuñaló por la espalda una vez. Si es así, el Madrid se equivoca. Creo que está bastante claro que ahora mismo, aún con Bellingham, el Madrid es peor equipo que hace un mes. Tampoco mejoraría el Barça con Darder. No, porque a la hora de la verdad su incidencia sería mínima. De nuevo los imperativos económicos y, en este caso, aún sería peor porque el Espanyol no dará las facilidades que ha dado al Madrid y pagar diez millones, en la situación de ruina actual, sería altamente cuestionable. No es por nada, pero pasar de Messi a Gündogan y de Gündogan a Darder, indica que la cosa no es que esté mal, es que está fatal.

La clave: los grandes del fútbol español ya no mandan en el nuevo negocio del fútbol.