Varias carencias y arranque de coraje

En un partido con numerosas alternativas, el Barça mostró algunas carencias, porque la competición europea amenazó con desnudar los puntos débiles del equipo, pero que pudo acabar ganando por su arranque de épica y coraje en los últimos minutos. Las apariciones de Ansu Fati en el tramo final bien pudieron reportarle la victoria al Barça. 

A medida que caían los minutos, se dispararon las ocasiones: el partido se convirtió en un toma y daca un poco caótico, con Rashford convertido en una auténtica pesadilla para la defensa del Barça. El equipo azulgrana amenazó con descoserse, sobre todo tras el segundo gol del United, de Koundé en propia puerta. En un saque de esquina, el Barça no puede permitirse un error así, de dos contra uno a balón parado. 

El planteamiento inicial fue sorprendente por parte de ambos entrenadores: Xavi colocó a Araujo como lateral derecho y a Koundé como central, en previsión de que Rashford pudiera percutir por la banda izquierda del ataque del United, pero para sorpresa de todos, Ten Hag colocó a Rashford de ‘nueve’ y a Weghorst casi como interior. 

Xavi no cambió de ida pese a ver que Rashford era el ariete del United, aunque quizá hubiese sido conveniente un cambio de posiciones porque es mucho más corrector Araujo que Koundé. Ter Stegen sostuvo al Barça en los minutos de duda que el Barça arrastró a lo largo de la primera parte, aunque no pudo evitar el gol de Rashford por el palo corto. 

El panorama que le queda al Barça por delante es complicado, porque en Old Trafford, para el partido de vuelta, no podrá contar con Gavi, sancionado, ni con Pedri, lesionado.