El Barça fue a remolque de un Efes intratable

Diferentes ritmos. Puede que el Efes no llegara al duelo en su mejor momento. Pero, el Barça no estuvo a la altura de un partido en el que se enfrentaba al campeón de la Euroliga y, además, en su pista. Excepto en un primer cuarto en el que los de Ataman estuvieron, en general, bastante espesos, el resto del encuentro fue claramente turco. Pensar que puedes ganar a domicilio al Efes permitiendole parciales de 30 puntos, en dos de los cuartos, es ser un iluso. Ya en el segundo período, el ritmo empezó de manera clara a favorecer al Efes. El Barça se olvidó de defensar y se apuntó a la fiesta del intercambio de canastas, y la apuesta le salió muy cara. Los de Saras dejaron que piezas como Bryant y M’Baye, no habituales como protagonistas, se erigieran en líderes de su equipo. Hasta entonces, Clyburn y Micic estaban sólo calentando motores y el Barça no supo aprovechar la coyuntura. Es evidente, que la posición de base en las filas blaugranas hizo aguas. No hablo tanto de los puntos de Laprovittola, muchos minutos como director, sino del control de juego y de adoptar las decisiones más convenientes para el equipo. El descanso fue un revulsivo para el Efes. En el tercer cuarto vimos al Efes dominador en Europa en los últimos tiempos. Duro, muy físico, con una defensa impecable, intimidando al Barça con un sinfín de tapones y balones recuperados y, ahora sí, con Clyburn y Micic como pareja estelar.

EL BARÇA NO PUDO COMPETIR

Los blaugranas lucharon hasta el final, pero no fueron capaces de competir por la victoria. El dominio del Efes durante 30’ fue evidente. Demasiados blaugranas se vieron superados por sus pares. En especial, el perímetro del equipo turco fue demoledor. Los 1x1 de Clyburn y Micic hicieron estragos en la defensa blaugrana. Por otra parte, creo que el Barça se fajó poco cerca del aro. Buscó en exceso el triple, pisó de manera rácana la pintura y, de aquí, la diferencia de faltas y tiros libres favorables al Efes. Los jugadores de Ataman recuperaron 11 balones, por tres del Barça. Se dieron 12 asistencias por equipo, pocas por los puntos anotados, y ello hace evidente que las acciones individuales del Efes fueron más trascendentes que las blaugranas. Uno de los peros al grupo de Jasikevicius es que en el definitivo periodo no fueran más contundente detrás, y dieran como bueno un parcial de 30-29, cuando perdían de más de 10 puntos y estaba en juego la victoria. El Barça fue siempre a remolque. En ocasiones forzado por la defensa rival y, a veces, por la calidad evidente de los jugadores del Efes. El juego interior del Barça tampoco estuvo bien. Sanli fue su mejor hombre, pero entre Vesely, Da Silva y Tobey fueron incapaces de sumar ni un punto. Demasiados puntos débiles como para pensar en ganar en Estambul.

EL EFES DEMOSTRO QUE ES CAPAZ DE TRANSFORMARSE CUANDO QUIERE, CLYBURN TUVO MOMENTOS ESTELARES

Sin menospreciar, sólo faltaría, la actuación de Micic, ante el Barça, fue Clyburn el estilete que acabó destrozando a los blaugranas. Minutos de otra galaxia, y con un acierto cara a canasta sólo al alcance de unos pocos elegidos.

El BARÇA NO FUE NI SÓLIDO NI CONTUNDENTE

Uno de esos duelos que hubiera podido durar un día entero, y el Barça no lo hubiera ganado. Hay que salir a jugar con una mentalidad mucho más dura y agresiva. El Efes sí que lo tuvo claro.