El Barça ya piensa en el Zalgiris

BUEN CIERRE DE LIGA REGULAR

El Barça cumplió con el trámite. Acabar la fase regular logrando la segunda posición es muy meritorio. El Valencia, pese a que lo intentó, no fue rival. Fue una lucha entre un juego colectivo, el blaugrana, ante un básquet mucho más individualista de los valencianos. No obstante, los de Mumbrú lucharon hasta el final, más allá del acierto, y ello es de agradecer. Hubo dos protagonistas indiscutibles antes del descanso.

Mirotic en el primer cuarto, 12 puntos, y Abrines en el segundo con 15, y un 5/6 en triples en menos de 5’. Por su parte, los valencianos se pusieron en manos de sus “pequeños”, y entre Harper, Jones, Radebaugh y Evans mantenían a su equipo dentro del encuentro. La igualdad también se explica por el sinfín de posesiones perdidas de los de Saras. Por el contrario, el dominio de los blaugranas a lo largo del partido en rebotes y asistencias fue total.

En ningún momento, el Valencia dio la impresión de que podía dar un susto al Barça. Se acercaba en el marcador, pero, en un suspiro, los blaugranas volvían a dar un estirón en el marcador. Pese que el Valencia se fue al vestuario con sólo 5 puntos por debajo, el Palau no estaba afectado por los nervios.

PENDIENTES DE OTROS MARCADORES

No hubo sobresaltos. El tercer cuarto fue plácido para el Barça. Como sucedió a lo largo de todo el encuentro, los blaugranas aprovecharon muy bien los cambios defensivos del Valencia en los 2x2. Se hartaron de meter balones cerca del aro a Mirotic, Sanli o Vesely. Poco a poco, y pese a los esfuerzos de Harper, el marcador empezó a romperse.

Y aunque el Barça, en el definitivo cuarto, únicamente anotara 2 puntos en lo primeros 5’, el resultado no peligró ya que su rival tampoco estaba para muchas florituras. El encuentro fue muy rápido. Se pitaron pocas faltas y, por tanto, pocos tiros libres. Un ritmo rápido de juego en ocasiones y, por parte valenciana, con poco tiempo de posesión en sus ataques.

Creo que mucho antes de que acabara el partido, el Palau estaba más pendiente de lo que sucedía en otras pistas. En especial atentos a lo que hacía el Zalgiris. No sé si podemos hablar de una buena carambola, creo que sí, ya que a buen seguro de que es el rival, aunque no lo digan, que todo el vestuario quería.

No será fácil, los lituanos son muy duros de superar, pero a cinco partidos, el Barça es favorito. Empieza el momento de la verdad, tanto en la Euroliga como en la ACB. Sin ir más lejos, este domingo el Madrid aterriza en el Blaugrana. El Barça se juega en este partido, y en el que disputará en Baskonia, el primer puesto de la ligar regular de la ACB.