Opinión

'Aló President'

Laporta y Flick, codo a codo entrando en el recinto de Colonia

Laporta y Flick, codo a codo entrando en el recinto de Colonia / FCB

Los tiempos han cambiado, pero la cultura audiovisual no ha hecho más que crecer y crecer. Todo el día consumimos videos, vivimos entre pantallas: móvil, tablet y televisión. Hasta los periódicos tienen sus canales de video, quién nos lo iba a decir. El Club cerró Barça TV, la televisión que no miraba ni el tato, para abrir una OTT, versión digital de la televisión en el siglo XXI, hasta aquí, podría parecer coherente: cambian lo sincrónico por lo asincrónico. Para explicarlo, van y la autodenominan el Netflix del Barça, aquí, la comparativa empieza a ser un poco grandilocuente y peligrosa, por no decir grotesca. Las plataformas audiovisuales para triunfar necesitan mucho contenido, bueno y actualizado continuamente, por tanto, eso suena a reto mayúsculo que, sin un gran presupuesto detrás, es imposible. Veremos de donde se obtiene, cada minuto de producción audiovisual es inversión y captar audiencia es de las cosas más difíciles que conozco. 

Un nuevo consultor externo, Toni Cruz, incombustible, será quien lo lidere, trayectoria no le falta y hoy en día el carnet de indentidad no debería ser un obstáculo para nada, tan sólo espero que no acabe en un típico guión de La Trinca. De Barça Studios, la palanca, hoy no hablaremos, pero me cuesta creer que Barça One pueda acabar siendo ni un impulso económico, ni de ningún otro tipo.

Tras el lanzamiento con la gran superproducción Orígenes – Araujo, que no suena a éxito de taquilla a lo Misión Imposible de Tom Cruise; la semana pasada tuvo su primer gran momento mediático con un protagonista esperado, por la necesidad de ser escuchado tras unas semanitas de titulares rocambolescos y decisiones sonadas. El Presidente dió una larga y dilatada entrevista al nuevo medio. Formato muy youtuber, formato Gerard Romero, que sí que la peta como streamer de actualidad culé.

Hubo una época donde Hugo Chávez decidió un día tener su programa de televisión, en domingo, sin un tiempo de duración predefinido, en función del miting que decidiera efectuar a la población venezolana para inculcarles que era un gran mandatario. La entrevista con Laporta, que como Chávez, siempre ha sido un tipo locuaz con una muy buena capacidad de explicarse, tanto en el formato de proximidad, como frente a los medios de comunicación, se emitió en un programa llamado 'Barça Notícies'.

Al Presidente, que dudo que me lea, puedo decirle que creo que aquí hay un filón. Él está siente comunicando y convenciendo en esos formatos. Además, si a pesar de que le hacen preguntas pactadas, contesta lo que quiere, le recomiendo que elimine a los periodistas del formato.

Le propongo a Laporta que una vez por semana, reutilice el título del programa del dictador venezolano (catalanizándolo), para hacer un programa suyo en Barça One: Aló President. A él le encajaría bastante y sería, con casi toda seguridad, el contenido más barato y con mayor capacidad de entretenernos que dispondría la OTT. Los telepredicadores siempre han tenido formatos audiovisuales resultones captando fieles audiencias.