Opinión

Alcaraz conquista París y supera un récord impensable

Alcaraz durante la final de Roland Garros ante Zverev

Alcaraz durante la final de Roland Garros ante Zverev / AP

Nunca antes un tenista de solo 21 años había logrado ganar tres Grands Slams en superficies distintas. US Open; Wimbledon y ahora Roland Garros. Un éxito sin precedentes y que lo convierte ya en uno de los más grandes.

Alexander Zverev empezó la final de Roland Garros con dos dobles faltas consecutivas. Parecía el presagio de un partido fácil para Carlos Alcaraz, pero no fue así. Ganó Carlitos el primer set y se vino abajo en el segundo cuando lo tenía todo a su favor. El tenista alemán es un muro difícil de superar. Tiene la solidez de Rafa Nadal, un revés espectacular y un saque que suele superar los 200Km/h, pero dispone de menos recursos tenísticos que el murciano. Y así, poco a poco, con momentos brillantes y alternando altibajos de uno y otro, se plantaron, tras tres horas y media, con empate a dos sets. 

El quinto y definitivo set empezó bajó una intensa tensión. Parecía más nervioso Zverev que perdió su primer servicio mientras Alcaraz requería una y otra vez la asistencia médica por unos dolores en su pierna izquierda. El cuarto juego de este set fue tan espectacular como decisivo. Se lo llevó Alcaraz y se empezó a intuir que podía llevarse el partido. Sin embargo, no fue sencillo. El alemán nunca desfallece ni regala nada y esta vez tampoco lo hizo, pero Alcaraz es mucho Alcaraz y se vino arriba. A todo eso, su entrenador, Juan Carlos Ferrero, ganador del torneo en el 2023, sufría, pero daba los consejos clave.

Pues entre una cosa y otra, don Carlos Alcaraz se llevó el quinto set y conquistó París. Lo hizo por tenis, por inteligencia y por esa tenacidad y fuerza que solo poseen los grandes campeones. ¡Muchas felicidades, campeón!