Djokovic salva sus molestias en la pierna y pasa a tercera ronda de Australia

Novak Djokovic tuvo un pequeño susto para ceder el primer set del torneo antes de clasificarse para la tercera ronda del torneo derrotando al francés Enzo Couacoud por 6-1, 6-7 (5), 6-2 y 6-0. El número 1 mundial, que sigue con sus molestias, no se le vio cómodo hasta los dos últimos sets.

Djokovic, se mostró ansioso, ante un rival muy inferior pero que se empleó a fono para inentar dar la sorpresa. Djokovic, que ya conocía la lesión de Rafael Nadal de su máximo rival en la lucha por los Grand Slams, que deberá estar entre seis y ocho semanas de baja por su lesión en el psoas isquio de su pierna izquierda, vio como se le despejaba el camino en su zona del cuadro con las derrotas de Casper Ruud y Taylor Fritz..

Clasificado en el puesto 191 mundial, el tenista francés de 27 años, afincado en las Islas Mauricio, donde es propietario de un hotel, no era inicialmente un rival complicado para Djokovic, en su estreno y primera participación en el Abierto de Australia y su sexto partido en un Grand Slam. Nada que ver con los 93 partidos (84 victorias) que lleva el exnúmero 1 en Melbourne, donde lucha por su décimo título y no pierde un partido desde 2018.

Problemas físicos

Las molestias en la pierna izquierda que arrastra Djokovic eran su principal preocupación. El serbio entró en la pista con un vendaje mayor que el primer día y se mostró incómodo en sus movimientos, a pesar de ganar el primer set en el que Couacaud, también con vendaje en su rodilla izquierda, además sufrió una aparatosa torcedura en el tobillo derecho que le obligó a una atención médica. No se escapó tampoco el exnúmero 1 de ser atendido de sus problemas en la pierna cuando con 5-4, en contra, tuvo que marchar a los vestuarios para que le retocaran su vendaje.

En el retorno a pista, Djokovic, que seguía incómodo, perdió tres 'break points' para romper el saque de Couacoud, que así aseguraba jugar el 'tie break' que se acabó llevando, remontando un 0-3, y con una doble falta final del tenista serbio, molestado por el grito de un espectador.

La reacción de Djokovic fue fulminante para certificar el partido en 2 horas y 55 minutos, cediendo solo dos juegos en los últimos dos sets. En media hora se apuntó el tercer set, cediendo solo dos juegos, para rematarlo en el cuatro con un contundente 6-0.