Los Nets, un ciclón sobre los Warriors

Con una primera mitad de 91 puntos y un Kevin Durant que rozó la perfección, los Brooklyn Nets aplastaron 143-113 en el Barclays Center a unos Golden State Warriors en crisis sin Steph Curry ni Klay Thompson y celebraron su séptima victoria consecutiva en la NBA, la undécima en sus últimos doce partidos. Kevin Durant anotó 21 de sus 23 puntos en la primera mitad, con 8 de 9 en tiros, y pudo ver desde el banquillo el último cuarto, en unos Nets que acabaron con nueve jugadores por encima de los 10 puntos. Ben Simmons aportó 10 tantos, con 4 rebotes y 8 asistencias y Edmon Sumner aportó 16 puntos, mientras que Patty Mills aportó 13 saliendo desde el banquillo, con 3 de 3 en triples. El equipo de Jacque Vaughn no echó de menos a Kyrie Irving, ausente por un problema de pantorrilla, y trituró a unos Warriors que perdieron su decimosexto partido de 19 disputados lejos de San Francisco, lo que supone la peor marca de la NBA. En total, los Warriors perdieron siete de sus últimos nueve encuentros.

Los vigentes campeones acumulaban ya 30 puntos de desventaja al comienzo del segundo período y volvieron a derretirse sin poder contar con Curry ni Thompson. En una noche de 13 puntos de Jordan Poole, con 1 de 11 en triples, el mejor de los Warriors fue James Wiseman, con 24 puntos y 9 de 10 en tiros. También anotaron 17 puntos cada uno Moses Moody y Patrick Baldwin, este último con 5 triples.

91 puntos de Nets al descanso

Fue un monólogo de los Nets desde el comienzo, ante unos Warriors que añadieron a la falta de dinamita ofensiva un total desinterés defensivo. El equipo de Brooklyn anotó 46 puntos en el primer cuarto (46-17), con 7 triples y mantuvo ese ritmo en el segundo, en el que metió 45 puntos y mantuvo un 71% de acierto en tiros. Durant dirigió a los Nets con un ritmo anotador asombroso. Conectó 8 de sus 9 tiros y alcanzó los 21 puntos al descanso con un triple que subió el 91-51 al luminoso. Hizo parecer fáciles jugadas de máxima dificultad y revalidó su candidatura al MVP de esta temporada, en la que está llevando de la mano a los Nets. Fue mérito de Wiseman, con un perfecto 7 de 7, si la humillación de los Warriors no llegó a más. El equipo de Steve Kerr acumulaba ya 13 balones perdidos al descanso y los Nets los castigaron con 21 puntos a 0. En la fiesta del Barclays Center participó también Ben Simmons, quien fue protagonista con un gran 'alley-oop' a pase de TJ Warren.

La unidad B de los Nets completa el trabajo

Tras una primera mitad que batió el récord de puntos de la historia de la franquicia, los Nets tuvieron un fisiológico bajón y los Warriors, que tocaron los 42 puntos de desventaja, lograron acercarse hasta los 18 puntos en la apertura del cuarto período (114-96). Sin embargo, en el momento en el que los vigentes campeones empezaron a saborear la idea de abrir nuevos horizontes en la noche del Barclays Center, dos triples consecutivos de Warren y Markieff Morris, unidos a 5 puntos de Patty Mills, volvieron a poner 30 entre las dos franquicias. En pocos minutos, otros dos triples de Morris aumentaron el margen a 137-99, lo que convirtió en un trámite el tramo final del duelo. Durant jugó los doce minutos del tercer período, y no volvió a la pista en el cuarto, sino que se dedicó a ver cómo sus compañeros sentenciaban el choque y celebraban su séptima victoria consecutiva.