Ja Morant, una historia de película

El base de los Grizzlies hace soñar a sus aficionados con uns playoff exitosos

Morant está jugando a nivel MVP gracias su juego por encima del aro y a un liderazgo extraordinario

Ja Morant, jugador de los Memphis Grizzlies

Ja Morant, jugador de los Memphis Grizzlies / AFP.

Joel Xaubet

Ja Morant se ha convertido en la nueva sensación de la NBA por méritos propios. El base de los Memphis Grizzlies está a un nivel superlativo y ha llevado a su equipo a una racha de 10 victorias consecutivas. El joven y atlético base se ha ganado el respeto de toda la liga con actuaciones al nivel de pocos, Morant promedia 27,2 puntos, 6,8 asistencias y 5,9 rebotes con un 51% en tiros de campo. Unas estadísticas a las que hay que sumarle acciones memorables como el tapón a Avery Bradley que dio la vuelta al mundo.

Los Grizzlies han alcanzado el siguiente nivel

La franquicia de Tennesse ya sueña con llegar lejos en estos playoff, pues el conjunto entrenado por Taylor Jenkins ha visto como en dos temporadas el equipo ha pasado de ser un proyecto a varios años vista a toda una potencia en el salvaje oeste. Es innegable que la llegada de Ja Morant mediante la segunda elección del draft de 2019 ha sido la clave para que el equipo se encuentre en la situación actual, sin embargo, nada de esto habría sucedido si no fuera por los secundarios de lujo con los que cuenta el equipo.

Desmond Bane, Dillon Brooks y Jaren Jackson Jr suponen una aportación constante de puntos y energía defensiva fundamentales para entender la realidad de los Memphis Grizzlies.

Morant no tuvo fácil llegar a la NBA

El camino de Ja Morant a la NBA no ha sido fácil, hasta su segundo año en la Universidad de Murray State no fue considerado un jugador capaz de jugar al máximo nivel. Al terminar su último curso en High School, Morant no se encontraba entre los rankings de los mejores jugadores de su edad.

Morant, consciente de la necesidad de hacerse un nombre en el baloncesto universitario, asistió a una exhibición amateur donde se presentaron demasiados jugadores y la organización decidió que los de mayor reputación jugarían en la pista central, mientras que los otros en espacios secundarios, en los que sería asignado la actual estrella de la NBA.

La casualidad se alió con Morant

Afortunadamente para Ja, la casualidad le cambió la vida, James Kane, ojeador de Murray State, se encontraba en la pista central cuando le entró hambre y se fue a por algo de comer, al volver a la pista principal vio que en una de aquellas canchas apartadas un jugador delgado tenía una habilidad especial con el balón, inmediatamente dejó de comer y se centró en ese chico.

Unos pocos minutos le bastaron a Kane para decidirse a llamar a su jefe para decirle: "Tendrías que ver esto. Estoy viendo a un chico excepcional, va a llegar a la élite". Una semana después, Ja estaría firmando su beca en Murray State.

El primer año de Morant en el baloncesto universitario no estuvo nada mal. Sin embargo, nadie pronosticaba que se acabaría convirtiendo en un jugador importante. Pero lo que fue un año correcto sería una explosión pocas veces vista. En su segunda campaña, Ja se consagró como una de las grandes promesas del baloncesto norteamericano, lo que lo llevó a ser el número 2 del Draft de 2019.

A partir de ahí la historia se cuenta sola, en 2 temporadas y media, el de los Grizzlies no ha parado de crecer y se ha convertido en una de las mayores atracciones para ver baloncesto, una capacidad atlética fuera de lo normal y un carácter de líder forjado a gracias a las dificultades que tuvo que superar para acabar siendo la cabeza visible de los Memphis Grizzlies.