La cita de Luka Doncic con la historia

El escolta de los Dallas Mavericks, Luka Doncic, vivió una (otra) noche histórica en la NBA. A bajas revoluciones, sobresaliendo por encima de jugadores contrastados como Chris Paul o Devin Booker. Como jugador franquicia y líder absoluto en pista, guio a la franquicia de Texas ante unos desastrosos Phoenix Suns (90-123) y luchará por un hueco en la final del anillo ante los Warriors.

El esloveno, que no había podido superar la primera ronda de los play-off desde su aterrizaje en la competición a través de un tercer pick en el Draft de 2018, completó una exhibición sin paliativos: 35 puntos, 10 rebotes y cuatro asistencias con 12 tiros anotados sobre 19 intentados y un 54% desde la línea del triple. Una versión sobrehumana para llevar a un equipo sin alto techo competitivo hasta las finales de la Conferencia Oeste, donde tampoco son favoritos.

Sus números durante toda la fase regular le avalan como uno de los jugadores más importantes en la actualidad en la NBA. Atrás ya las lesiones que le han lastrado, el esloveno ha promediado 28.4 puntos, 9.1 rebotes y 8.7 asistencias con un 45.7% de efectividad en los tiros de campo y un 35.3% desde la línea de 6,25 metros.

El ex del Real Madrid mostró todo arsenal en el tiro desde la media y la larga distancia y se erigió como el indiscutible líder que está destinado a ser durante toda su trayecto en la NBA. Estuvo secundado por Spencer Dinwiddie, con 30 puntos, y Jalen Brunson (24): entre los tres jugadores más importantes de la pizarra de Jason Kidd lograron un total de 89 puntos, tan solo uno menos que todo Phoenix Suns en el partido.

¿Toca soñar con la final del anillo?

La franquicia de Texas regresa a unas finales de Conferencia, algo que no sucedía desde hace más de una década (2011). Por aquel entonces, liderados por un inconmensurable Dirk Notwizki en la zona, no solo alcanzaron la final, sino que también conquistar el primer y único anillo de un equipo que nació en los años 80 y que no contaba con un pasado glorioso.

Los Mavs han disputado un total de cuatro finales de Conferencia con dos victorias (Phoenix Suns en 2006 y Oklahoma en 2011) y dos derrotas (Lakers en 1988 y San Antonio Spurs en 2003). En esta ocasión, el equipo se enfrentará a unos titánicos Warriors, que apearon los Memphis Grizzlies en la ronda anterior, y que han recuperado su mejor versión con Curry, Thompson y Green.