SUMAR

La política de vivienda tensiona la coalición de Gobierno: "Sánchez no está haciendo nada"

El socio minoritario pone en la diana a la ministra de Vivienda y advierte del "desgaste" en caso de mantener la "inacción"

La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. / EFE

Sumar se prepara para elevar su ofensiva contra el PSOE por las políticas de vivienda. La coalición de Yolanda Díaz ha fijado este asunto como prioridad máxima esta legislatura, una apuesta que hasta ahora no han visto respaldada por el ala mayoritaria del Gobierno, y en la que quieren seguir presionando en la negociación de los Presupuestos de 2025, donde han planteado la inclusión de nuevos impuestos para el alquiler turístico y una penalización fiscal para los fondos de inversión que realicen actividad inmobiliaria relacionada con este tipo de arrendamientos.

El socio minoritario del Gobierno centra gran parte de sus críticas en la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, y en el propio presidente, que "no ha hecho nada" en esta materia. Uno de los casos paradigmáticos que ponen de ejemplo para ilustrar esta inacción son las 'golden visa', por las que se concede el visado de residencia a aquellos extranjeros que adquieran una vivienda de más de medio millón de euros. Una medida que, creen en Sumar, incentiva la compra por parte de no residentes y tensiona aún más los precios.

Una causa que abanderó el propio Pedro Sánchez, que el pasado 8 de abril anunció su derogación: "Vamos a eliminar la concesión de la Golden Visa", y "vamos a tomar las medidas necesarias para garantizar que la vivienda sea un derecho y no un mero negocio especulativo", dijo entonces el presidente. Semanas después de aquel anuncio, Sumar registró en el Congreso una proposición de ley para prohibir esta figura y presionar en este sentido.

Pero más de cuatro meses después, la promesa no se ha cumplido y en Sumar ya apuntan directamente al presidente, que "dio su palabra" y "se comprometió" y que sin embargo "no ha hecho nada". Ni en cuanto a las golden visa ni, consideran, en cuanto al resto de políticas en esta matera.

La coalición de izquierdas señala directamente a la ministra de Vivienda, con quien han mantenido distintos choques en los últimos meses por la "falta de ambición" de sus políticas. Estas diferencias llevaron a que Sumar anunciase su rechazo por primera vez una ley salida del Consejo de Ministros, llevando a Moncloa a retirar del Congreso la ley del suelo, en la que se había incluido una enmienda para derogar también las golden visa. Después del fracaso de esta norma de Isabel Rodríguez, que blindaba la planificación urbanística frente a reclamaciones, el ministerio planea ahora introducirlo vía enmienda en la Ley de Servicio Público de Justicia que desde abril se encuentra en tramitación en el Congreso.

Los choques con Vivienda

Los choques con Rodríguez han sido permanentes, y en Sumar consideran que las propuestas de su ministerio quedan muy lejos del acuerdo de coalición firmado con el PSOE, que fijaba como objetivo la "contención de precios" del alquiler y para ello anunciaba la creación de un índice de precios del alquiler para identificar las zonas tensionadas e "impulsar la puesta en marcha de la regulación de los precios de los alquileres". Pero ese índice de precios pactado fue un motivo de enfrentamiento entre los socios de coalición.

El pasado marzo, el ministerio puso en marcha esta herramienta para fijar unos topes máximos de precios en función de las características de la vivienda. Un límite de precio que, sin embargo, solo se podía aplicar en aquellas zonas tensionadas -siempre y cuando lo solicitase la comunidad autónoma- y se aplicaban únicamente a viviendas de grandes tenedores o aquellos nuevos contratos para inmuebles que hubieran estado vacíos los cinco últimos años. Además, era el propio arrendador el que describía las características de la vivienda, dándole margen de discrecionalidad a la hora de fijar el tope del alquiler.

Después de la publicación del índice, Sumar se revolvió contra Isabel Rodríguez, pidió una rectificación y criticó duramente la medida, al considerar que el margen de intervención era extremadamente reducido y llegó a reservarse la posibilidad de plantear una reforma propia, cosa que a día de hoy no ha hecho.

Alquiler turístico, otro frente

Pero no es la única medida que ha provocado el enfrentamiento entre Isabel Rodríguez y el socio minoritario de coalición. La timidez que en Sumar achacan a la limitación del alquiler turístico es otra de las causas abiertas. Este asunto también venía recogido en el pacto de Gobierno, donde se incluyó la regulación del alquiler turístico en zonas de mercado tensionadas.

Pero lo cierto es que a día de hoy no se han dado pasos en este sentido y la única reforma del Ministerio de Vivienda consistió en reformar la Ley de Propiedad Horizontal para que los propietarios tuvieran que autorizar las actividades económicas en la finca. Una iniciativa que volvieron a criticar en Sumar, que no dudó en criticar abiertamente el papel de Isabel Rodríguez y defendió que se estaba "lavando las manos" al "poner la pelota en el tejado de los vecinos".

Rodríguez, cuestionada en Sumar

La figura de la ministra socialista es muy cuestionada en la coalición de izquierdas, donde recuerdan de manera recurrente una de sus primeras afirmaciones como ministra, cuando desde el Palacio de la Moncloa aseguró que "la vivienda es un derecho, pero también es un bien de mercado".

En los últimos días, en Sumar también han censurado las declaraciones que hizo en Málaga, donde defendió la bajada del precio de alquiler porque "si los malagueños y malagueñas no tienen un lugar en el que vivir, ¿quién va a atender a los turistas? ¿Dónde se alojan los camareros que nos sirven un vino y un espeto?". Unas palabras muy comentadas en privado en las filas de Sumar, donde desconfían de la voluntad del PSOE para emprender políticas en este sentido.

En Sumar han puesto sobre la mesa de negociación con el PSOE una batería de medidas para desincentivar el alquiler turístico, entre ellas la imposición del 21% de IVA para este tipo de arrendamientos frente al 10% que soportan los hoteles, para desincentivar el alquiler temporal frente al de larga duración, poniendo así más viviendas en el mercado y disminuyendo la presión sobre los precios. También se contempla la creación de un impuesto especial del 25% para las socimis (sociedades de inversión inmobiliaria) en caso de que hayan tenido actividad relacionada con el alquiler turístico.

El impulso de nuevas figuras impositivas que reclama el socio minoritario del Gobierno contrasta con las políticas impulsadas en esta materia por el PSOE, que hasta ahora se ha resistido a lanzar grandes iniciativas en torno a este asunto.

En Sumar consideran que las políticas de vivienda son un asunto "crucial" del que dependerá el futuro del Gobierno de coalición, y se muestran convencidos de que, en caso de que no se lleven a cabo, Pedro Sánchez tendrá que asumir un fuerte "desgaste", tras haber abanderado en su discurso el derecho a la vivienda sin que se traduzca en medidas concretas. Y para Sumar esta será, a partir de septiembre, una de sus principales batallas a librar.