En Baleares

Gabriel Le Senne asegura que su imputación "no es ninguna novedad" e insiste en pedir el archivo

El presidente del Parlament afirma que los hechos por los que lo acusan están "adornados con valoraciones subjetivas descontextualizadas y tendenciosas"

El presidente del Parlament, Gabriel Le Senne.

El presidente del Parlament, Gabriel Le Senne.

Pere Morell EFE

El presidente del Parlament de Baleares diputado del partido político Vox, Gabriel Le Senneasegura, a través de un portavoz, que su reciente imputación por un delito de odio "no es ninguna novedad" e insiste en pedir el archivo de las denuncias en su contra, al considerar que los hechos descritos por las acusaciones están "adornados con valoraciones subjetivas descontextualizadas y tendenciosas".

Preguntado para que valore el nuevo paso judicial, que afecta directamente a la segunda autoridad de Balears, desde el entorno de Le Senne se quita hierro señalando que "la citación forma parte del proceso, es un trámite habitual".

Le Senne tendrá que defenderse ante los tribunales sobre su polémica reacción en un pleno oficial, donde rompió la fotografía de las Rojas del Molinar, asesinadas por el franquismo.

El Juzgado de Instrucción número 1 de Palma instruye esta denuncia de Memòria de Mallorca y los familiares de Aurora Picornell y Antònia y Maria Pascual contra Le Senne (Vox), que en el pleno del Parlament balear del pasado 18 de junio rompió una foto de Picornell cuando se debatía la toma consideración de la propuesta de Vox para derogar la Ley de Memoria Democrática.

En el escrito presentado este jueves ante el juzgado, la defensa de Le Senne afirma que la rotura del retrato fue "accidental" y que los «hechos descritos en las denuncias y en la querella (...) son totalmente atípicos desde el punto de vista penal».

Además, "están adornados con valoraciones subjetivas descontextualizadas y tendeniosas, incluyendo hechos ocurridos hace más de 80 años, los cuales dejan patente el ánimo incriminatorio de las partes que las formularon y los fines espurios de naturaleza política que persiguen con ellas".

El texto recuerda que la Mesa del Parlament "debe ser neutral y no interferir en los debates", según recoge el Reglamento de la Cámara y tal y como lo procuró Le Senne.

La abogada de Le Senne explica al juez que varios diputados "a título individual" por wasap y el PP a través del vicepresidente del Parlament, Mauricio Rovira, se quejaron de la actitud de las dos miembros de la Mesa.

Seguidamente, el letrado mayor de la cámara confirmó que esta exhibición de carteles «partidistas» en la Mesa era «improcedente», recoge el escrito, por lo que Le Senne ordenó sin éxito retirarlos de manera reiterada, alterándose así "gravemente el orden en el Parlament".

"En un momento dado (...) el presidente intentó retirar personalmente uno de ellos con la intención de garantizar la neutralidad del Parlamento, pero al estar pegado el folio con muchas cintas adhesivas, se rompió accidentalmente al tirar", esgrime la abogada.

Todo esto ocurrió "dentro del tenso clima de alteración del orden" por parte Garrido, vicepresidenta segunda del Parlament, y de Costa, secretaria segunda, con la intención de mostrar su desacuerdo con la iniciativa política que se estaba debatiendo, "con absoluto desprecio hacia el pluralismo político".

Para la defensa de Le Senne, es evidente la "clara intencionalidad política" de los denunciantes, que tratan de "conseguir por cualquier medio el relevo del presidente del Parlament, utilizando para ello de la Administración de Justicia sin rubor para su lucha partidista".

Por ello pide al juez que dicte un auto de archivo y sobreseimiento de este procedimiento penal.