Borràs dará un paso al lado y cederá la presidencia de Junts a Puigdemont si se lo pide

"En Junts todo el mundo es 'puigdemontista'". Así ha respondido la presidenta de la formación, Laura Borràs, en una entrevista este lunes en Catalunya Ràdio cuando se le ha preguntado por si cedería su cargo a Carles Puigdemont si se lo pidiera. Borràs ha recordado que el expresident dejó la presidencia del partido por voluntad propia y ha defendido que no le hace falta "ningún cargo orgánico" para tomar las riendas de la organización que él mismo fundó. Sin embargo, ha apuntado que si le pide recuperar el puesto, no se opondrá.

En este sentido, ha añadido que no podrá "ningún problema" a quien la fichó para entrar en política, en referencia al expresident que la fue a buscar en 2017 para formar parte de la lista de Junts per Catalunya en las elecciones del 21 de diciembre convocadas tras en 155. "Si alguien genera consenso en Junts es Puigdemont", ha remachado.

El expresident afirmó en múltiples ocasiones durante la campaña electoral catalana que solo contemplaba dos opciones: regresar al Palau de la Generalitat siendo reelegido como president o abandonar la primera línea política. Sin embargo, una vez conocidos los resultados, las voces dentro del partido que le piden que se quede han aumentado exponencialmente. Un adiós del exjefe del Govern, obligaría a los posconvegrentes a buscar un relevo, algo que inevitablemente desataría una nueva pugna interna, por lo que algunos dirigentes quieren evitar que se marche. 

Puigdemont dejó el cargo del partido que él mismo creó, en 2022. En aquel momento, llevaba un tiempo alejado de la gestión del día a día y cedió el testigo a Borràs, como presidenta y a Jordi Turull, como secretario general. Sin embargo, a pesar de no tener ningún cargo ejecutivo, nunca dejó su papel de líder de facto, y decidió volver a implicarse en las negociaciones del día a día cuando los 7 escaños de Junts en el Congreso se volvieron determinantes para la investidura de Pedro Sánchez.

De momento, el líder de Junts mantiene que quiere presentarse a la investidura, a pesar del rechazo sin paliativos que ya recibió del PSC, que debería abstenerse pese a haber ganado los comicios.