Mundial femenino

Acertó Salma, acertó Vilda y ¿acertó el VAR?

El gol de la maña en la prórroga, los cambios del seleccionador y las decisiones del videoarbitraje, que anuló un penalti discutible en contra de España y señaló otro a favor de las de Vilda clarísimo, permite a las españolas seguir haciendo historia

Las jugadoras de la selección celebran su pase a las semiffinales del Mundial.

Las jugadoras de la selección celebran su pase a las semiffinales del Mundial. / EFE

Fermín de la Calle

El VAR, ese invento demoniaco que ha convertido el fútbol masculino en un gallinero infinito, imparte justicia en el Mundial femenino con naturalidad entre las chicas. Un videoarbitraje que España agradeció enormemente en su partido ante Países Bajos, porque cuando más peliagudo se puso el asunto, la tecnología salió en defensa de las españolas. Primero en un penalti de Irene Paredes que rearbitró la decisión de Frappard, algo que en chicos jamás habríamos visto porque las interpretaciones del colegiado no se desdicen salvo clamorosa evidencia. Y no era el caso. Después señaló un penalti tan ingenuo como evidente que permitió a Mariona marcar y adelantar a España en su camino a semifinales, lo que se certificó disputando una prórroga agónica en la que otro gol histórico de Salma Palalluelo fue decisivo. Bendito VAR, bendita Salma.

España salió valiente a jugar el partido en campo neerlandés, pero lo hizo con sentidiño. Una actitud que recordaba más a la selección que goleó a Suiza que a la que fue arrasada por Japón, partido del que Vilda y sus chicas aprendieron mucho. Sin prisas, acabando las jugadas y estando bien paradas cuando perdían la pelota.   

Vilda sigue moviendo el once

El seleccionador volvió a tomar decisiones en el once y apostó por un equipo más robusto, con Mariona reforzando el juego interior en la sala de máquinas en lugar de una Salma a la que reservó junto a Alexia Putellas. Quería generar Vilda superioridad por el centro que le permitiese atacar por fuera. Y atrás Oiane y Ona Batlle volvían a cerrar los carriles con Irene y Laia en el eje por delante de su compañera en el Barça Cata Coll.  

A los cuatro minutos una pared entre Jenni y Esther generó la primera oportunidad española. Pudo y debió adelantar a España Alba Redondo en el minuto 16 en una jugada en la que la delantera se topó con el palo dos veces. Pero el gol llegó en 37 tras un desborde de Ona por banda, como casi todos los ataques españoles, que terminó en un centro que remató a la red Esther González tras recibir un pase de Alba, pero estaba en fuera de juego.  

Con Aitana y Jenni muy vigiladas eran Mariona y Esther González las que se dejaban ver más en la construcción y finalización con buenas triangulaciones. Terminó la primera parte sin que Países Bajos hubiese disparado a portería frente a los once lanzamientos de las españolas, tres de ellos a puerta a los que su sumaban dos palos y un gol anulado. Al descanso España atacaba bien y defendía mejor. Faltaba la puntilla, pero tenía mucha pólvora Vilda en el banquillo para la segunda parte. 

España se mostraba voraz tras pérdida, lo que le permitía robar una cantidad ingente de balones y coger a las holandesas descolocadas para seguir generando ocasiones. Esther Gonzaléz, Mariona, Jenni, Alba.... Ni rastro de Roord, Groenen, Damaris, Martens o Beerensteyn. Se había activado Hermoso tras el descanso y lo agradecía España. Faltaba por aparecer Aitana.

Penalti en contra rearbitrado por el VAR

Pero entonces Países Bajos comenzó a ganar peso en el partido y en el minuto 62 en un pase a la espalda de la zaga Paredes cargó en el área contra una Beerensteyn que llegaba en ventaja y Frappart indicó penalti. Sin embargo, después de revisar la jugada en el VAR, la árbitra francesa reculó. Un aviso para las españolas: a las neerlandesas les hacía falta muy poco para generar peligro. España pasaba por su momento más incómodo del encuentro, que pedía decisiones de Vilda en forma de cambios. Y el seleccionador leyó la situación apostando por la verticalidad de Salma en lugar de una Alba a la que se hacía largo el choque.

El duelo se había abierto, para bien y para mal. Las neerlandesas pisaban más área, pero con el cansancio aparecían más espacios a la espalda de las tulipanes. Restaban 20 minutos cuando Tere Abelleira hacía trabajar a Van Domselaar, la portera rival. Ivana Andrés entraba por Laia Codina, que se retiraba mareada, con el viento rolando en contra.

Penalti a favor pitado por el VAR

Y entonces volvió a ocurrir. En el minuto 79 una pelota en banda para Salma terminó con una cabalgada de la maña, que centró al área y la pelota tropezó en la mano de una holandesa y terminó en córner. Pero Frappard era avisada por el VAR, advirtiendo que había mano y que era dentro del área. Penalti en el que Mariona marcaba apoyándose en el palo. Adonde no llegaba la puntería de las de Vilda aparecía el videoarbitraje, esta vez con justicia indiscutible.

Pero Países Bajos había crecido mucho y en el primer minuto del descuento, cuando España ya saboreaba el pase a semifinales, otro balón en profundidad cogió a las de Vilda distraídas y Van der Gragt, que provocó el penalti español con su mano, lograba el empate. Aitana había dejado su sitio a Irene Guerrero, el partido se había roto y tanta ida y vuelta terminó por desordenar a las españolas, que echaban en falta a una Alexia que penaba en el limbo del banquillo por su inactividad por la lesión. El choque desembocó en una prórroga en la que España debía reordenarse ante unas neerlandesas mucho más agresivas en ataque.

Sale Alexia y marca Salma

Las de Vilda estaban a merced de las holandesas cuando el seleccionador trató de cambiar el partido colocando a Alexia entre líneas y a Eva Navarro en la derecha, para mandar a Salma a la izquierda a pierna natural. Salían del campo Mariona y Esther, las dos mejores de España, pero ya muy debilitadas. Un cambio que sentó bien a equipo, que ganó dinamismo y capitalizó la posesión de nuevo. Arrancó la segunda parte del tiempo extra con una estampida de Beerensteyn que salió fuera por poco. El empate era de cristal con los penaltis asomando al fondo. Volvió a tenerla Beerensteyn, que remató alto clamorosamente en el área pequeña, y en la siguiente jugada apareció Salma Palalluelo, que encaró, se sacó a su defensora con una bicicleta y apoyó su disparo en la cepa del palo para que acabase besando las redes. Minuto 112 y España se aferraba al Mundial. ¡Salma, de mi vida!

Hay que felicitar a las chicas por su tenacidad y a Vilda por su gestión del partido. Porque los cambios del seleccionador en la prórroga cambiaron la decoración de una prolongación que no pintaba bien. El madrileño reorganizó a la selección en torno a Alexia, dando espacios a Salma y llegada a Eva, lo cual resucitó a una España que a los puntos fue mejor que las neerlandesas. Aunque nunca dejaremos de agradecer el rescate del VAR en dos momentos claves. Ahora a esperar el desenlace del Suecia-Japón, que se jugaba a las 9:30, con la esperanza de no volver a cruzarnos con las niponas, a las que nadie quiere volver a ver.