Asensio tuvo el gol que faltó en sus botas

Marco Asensio volvió a ser el '9' elegido por Luis Enrique, que dejó en el banquillo -por si se atascaba el partido- a Álvaro Morata, máximo goleador de la selección española en Qatar. El delantero del Real Madrid, aunque participó poco, trabajó bien la presión y generó peligro, pero falló una ocasión en la primera parte que podría haber evitado llegar a los penaltis e incluso el triste final de España en el Mundial.

De menos a más, Asensio fue encontrando su lugar en el campo. Por la disposición y el planteamiento de Marruecos, que con una acumulación de futbolistas en la zona de ataque de la Roja no dejaba espacios, España no encontraba profundidad.

Lo mejor de los de Luis Enrique fue la presión alta de Asensio, Ferran y un Gavi incansable. Bono jugó varias veces con fuego con el balón en los pies y estuvo a punto de robarle la cartera el mallorquín. Pero no lo logró.

LO TUVO A TOCAR

Tampoco pudo transformar la ocasión más clara que tuvo España antes del descanso. Leyó bien Asensio el pase en profundidad de Jordi Alba y rompió la línea defensiva para poder rematar. El balón se estrelló contra el lateral de la red y el delantero se llevó las manos a la cabeza, consciente de que los fallos se pagan caros en unos octavos de final de un Mundial.

En el descanso mandó a calentar a Morata Luis Enrique. Y en el 63' entró por Asensio. Partido correcto del de Palma, que realizó un trabajo importante más invisible que evidente -solo 23 intervenciones- para aportar dinamismo a una selección española que se encontró un partido rocoso. De nada sirvió y el gol se siguió resistiendo. También en la tanda de penaltis. Y España dijo adiós al Mundial.