Aston Martin da con la tecla y avisa de su gran mejora que está por llegar

Las actualizaciones, eterno argumento para el optimismo en la escudería de Silverstone

En México regresa la esperanza, a la espera de ver si funcionan de una vez

Fernando Alonso, en Austin durante el GP de EEUU

Fernando Alonso, en Austin durante el GP de EEUU / Aston Martin

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Dicen que hay que ver siempre la botella medio llena. Ese argumento de los optimistas es llevado a rajatabla por los responsables de Aston Martin, tanto que a veces se pasan y la botella rebosa su contenido.

Y es que Fernando Alonso sufrió un fin de semana horripilante en tierras tejanas. El equipo no logró la mejor configuración posible de las traídas y llevadas 'actualizaciones', pero en Aston Martin creen que pueden sacar mucho más rendimiento en las próximas citas.

Y es que la cita estadounidense fue el peor fin de semana de la temporada para Aston Martin. Los coches verdes aspiraban a grandes hitos gracias a un nuevo paquete de mejoras que de entrada no funcionó.

La lista de novedades de la FIA señalaba que el AM23 tendría un nuevo difusor y un 'beam wing', el ala pequeña que va en la parte del ala trasera. Se incorporaba un nuevo suelo y un rediseño de la parte superior de los pontones para ganar carga aerodinámica y que el control de la parte trasera del coche fuese mejor.

Pero todo se torció desde el principio, puesto que un error en la simulación hizo caer al equipo en una inexactitud a la hora de configurar los frenos, lo que provocó un fallo de refrigeración.

"A causa de un error que tuvimos en la simulación, dimos excesiva manga ancha a los frenos delanteros y por eso se incendiaron en la FP1. Sólo dimos un par de vueltas con Stroll y eso fue un obstáculo para el resto del fin de semana", explicó Eric Blandin, director técnico de Aston Martin.

Además, el formato al sprint redujo el tiempo que tuvo la escudería para solucionar ese contratiempo antes de la clasificación, el viernes. Los dos coches se quedaban fuera de Q3 por primera vez en toda la campaña. "Tuvimos incógnitas con el nuevo paquete, así que hemos ido a ciegas a la clasificación... Este es el resultado", dijo un abatido Alonso.

El sábado siguió el calvario. El bicampeón español exprimió su coche al límite durante la clasificación para la carrera corta, pero no bastó. Salió el 12º en la primera prueba puntuable del fin de semana y Lance Stroll dos plazas por detrás. El astur tuvo problemas desde la salida, mientras que el canadiense fue obligado a retirarse con más problemas en los frenos.

Aston Martin tomó posteriormente la decisión de romper el parque cerrado para retocar las configuraciones de sus dos monoplazas. El equipo recuperó la especificación de Qatar para el coche de Alonso, mientras que Stroll mantuvo las actualizaciones.

Ello les obligó a salir desde el pitlane, pero la carrera trajo buenas noticias, al menos. El AMR23 fue más rápido el domingo. El canadiense acabó undécimo, partiendo último y puntuó por primera vez después de cinco citas, por lo que a la vista está que el nuevo paquete funcionó en ritmo de carrera.

Este último compás hace que Aston Martin se optimista de cara al Gran Premio de México. Los tres días en Austin dejaron ver que el paquete funciona realmente como esperaban, aunque de primeras tuvieron problemas para ajustarlo.

"No hemos conseguido la mejor configuración posible para el coche este fin de semana, pero estamos convencidos de que podemos sacar mucho más rendimiento del monoplaza. Estábamos lejos de ver el verdadero rendimiento de este paquete", apuntó Blandin.

En México se verá...