Bordalás explica la polémica sobre no dejar entrar a la prensa a los entrenamientos

Pepe Bordalás es un entrenador metódico. Sus métodos no gustan a todos. De hecho, podríamos decir que no gustan a la mayoría, pero el caso es que nadie puede dudar de su validez y eficacia. Lo que está haciendo al mando del Getafe desde que lograra el ascenso es simplemente para quitarse el sombrero.

Evidentemente su juego no pasará a los anales de la historia por su vistosidad y belleza, pero poco le importa esto a un club que debería estar peleando por evitar descender y que se encuentra ahora mismo y desde hace un tiempo en batallas de una índole bien distinta. Pero como en general lo que le gusta a la prensa y a los detractores es rajar, pues el ‘Geta’ de Bordalás suele estar en el ojo del huracán por jugar ‘bailando’ sobre el límite del reglamento.

En más de una ocasión ha tenido que salir al paso de las críticas el exentrenador del Alavés o Alcorcón para defender la honra de sus jugadores. La última polémica ha llegado al no permitir el técnico del club azulón entrar a los entramientos a los medios de comunicación. Bordalás ha negado rotundamente que tenga nada en contra de la prensa o que intente impedir el trabajo de los medios. Lo aduce a que “es por protegernos, nos ha llegado que nos graban y eso ayuda al rival”.

Mediante esta medida controvertida quiere evitar que los demás equipos puedan estar atentos a las evoluciones y tomen nota del sistema de juego o modificaciones que se puedan introducir.