JJOO

Se cancela (por quinta vez) un entrenamiento olímpico en el río Sena

Las autoridades han invertido más de 1.4000 millones de euros en un mega embalse situado en la cuenca de Austerlitz, de los cuales la mitad corren a cargo del Estado, para “devolver el Sena a sus ciudadanos”. 

Río Sena en París.

Río Sena en París. / Michael Kappeler/dpa

Leticia Fuentes

Leticia Fuentes

Este martes, por quinta vez, las autoridades han cancelado el entrenamiento previsto de natación en aguas abiertas, al igual que lo hicieron el pasado domingo, por los altos niveles de toxicidad en el agua, especialmente por los alto índices en el agua de la bacteria E.Coli, que suele aumentar su presencia después de las precipitaciones. 

Según informa el medio francés, Le Parisien, este lunes antes del triatlón mixto, el comité organizador comunicó a los triatletas del exceso de los índices de bacterias superando los límites reglamentarios permitidos. A pesar de esa información, la prueba siguió adelante y más de 50 triatletas el lunes saltaron de nuevo al agua.

Esta nueva cancelación mantiene el debate abierto sobre la salubridad del río más famoso de Francia, pero también abre uno nuevo: por qué cancelar los entrenamientos y no las pruebas. Preguntas que crecen, especialmente en las últimas horas, tras conocerse que varios triatletas han caído enfermos tras la competición de triatlón del pasado miércoles. 

Varios triatletas enfermos tras su baño en el Sena

“Deben aclararse las garantías de antemano y asegurar que no haya incertidumbre para los atletas”, afirmó el Comité Olímpico Belga tras conocerse que su delegación no competiría en el triatlón mixto del lunes después de que su triatleta, Claire Michel, cayese enferma por la bacteria E.Coli, tras participar en la competición en el Sena del pasado miércoles. Una delegación en cuadro y sin poder competir, y muchas dudas sobre la calidad del Sena en el aire.

“El COIB y el Triatlón Belga esperan que se aprendan lecciones para las próximas competiciones de triatlón en los Juegos Olímpicos”, explicaron en un comunicado las autoridades belgas.  

Tras su primer baño en el río, la triatleta belga lleva de baja cuatro días y ha tenido que visitar en varias ocasiones el policlínico de la Villa Olímpica por un importante cuadro vírico. No solo ella, también el atleta suizo, Adrien Brifdod, cayó enfermo con problemas gastrointestinales que, por el momento, su delegación niega que estos problemas relacionados con su participación en la competición del pasado miércoles; “El atleta se sintió mal durante la carrera (...)" y lo achacan a un posible "virus en la Villa Olímpica".

Aun así, los deportistas olímpicos critican la insistencia de las autoridades francesas por dar una imagen de éxito en las pruebas que se realizan en el río parisino: “Si la prioridad fuera la salud de los atletas, entonces esta carrera se habría trasladado a otro lugar hace mucho tiempo. Somos sólo marionetas”, criticó la triatleta belga, Marten van Riel, el pasado miércoles tras acabar la competición. 

Una depuradora de más de 1.400 millones de euros

El pasado 17 de julio, tras el baño de la alcaldesa en el río Sena que dejaba una imagen histórica para París, el medio francés, Mediapart, destapaba los ‘intringulis’ de este "storytelling" del ayuntamiento de París sobre el río. Después de entrevistar a varios expertos, la investigación concluía que, las autoridades francesas habían realizado un estudio diario de la calidad del agua, es decir, no es una prueba genérica del estado del agua. Los tests se realizan diariamente y el día que Anne Hidalgo se bañó, la calidad del agua era óptima, pero nada aseguraba que los siguientes días lo serían. Además, los resultados del test se conocen 24 horas después de la prueba realizada en el agua, por lo que, no garantiza que en esas 24 horas posteriores, los niveles de toxicidad en el Sena hubieran aumentado de nuevo. Aunque, según Samuel Colin-Canivez, responsable de la construcción del gran embalse del Sena, "el nivel 0 de vertido de aguas residuales en un río no existe".

Las autoridades llevan años invirtiendo para que esta imagen histórica de atletas bañándose en el río Sena pueda producirse tras más de 100 años de prohibición. Hasta el momento, se han invertido más de 1.4000 millones de euros en un mega embalse situado en la cuenca de Austerlitz, de los cuales la mitad corren a cargo del Estado, para “devolver el Sena a sus ciudadanos”. 

Esta megaconstrucción se encuentra a 30 metros bajo tierra, a una profundidad de un edificio de 10 pisos, y es capaz de almacenar cerca de 50.000 m3 de agua, unas 20 piscinas olímpicas, para ayudar a limpiar el agua del río y reducir así sus elementos tóxicos. Aunque, según las autoridades, las precipitaciones parisinas siguen siendo un reto a la hora de mantener esos niveles de tóxicos a raya.