JJOO

32 años y cuatro finales después, el deporte femenino vuelve a lo más alto

Desde que la selección de hockey hierba consiguiera el oro en Barcelona, ningún otro equipo femenino había sido capaz de subir a lo más alto

Las waterpolistas españolas posan con la medalla de oro en el podio de los Juegos Olímpicos de París 2024 este sábado en Nanterre, Francia

Las waterpolistas españolas posan con la medalla de oro en el podio de los Juegos Olímpicos de París 2024 este sábado en Nanterre, Francia / EFE

Albert Briva

Albert Briva

Miki Oca y las suyas consiguieron el merecido oro que tanto buscaban desde que Estados Unidos las apeó por primera vez en Londres 2012. Desde entonces, se han ido sucediendo las medallas en europeos y mundiales, consiguiendo en ambos casos el preciado metal dorado que se colgaron por fin ante Australia en la capital francesa este mismo sábado.

Un triunfo que pone la guinda a un ciclo de ensueño para una generación dorada y que pone fin además a la maldición que perseguí el deporte femenino español en los deportes de equipo. Desde que el hockey hierba consiguiera subir a lo más alto del podio en Barcelona 92', ningún equipo femenino había conseguido repetir la hazaña.

Hasta cuatro finales se escaparon por el camino; las dos que el equipo americano arrebató a las chicas del waterpolo (Londres y Tokio), la que el 'Dream Team' ganó a las españolas en baloncesto en Río de Janeiro 2016 y la que perdieron hace pocos días el equipo del 3x3 ante Alemania.

32 años de ostracismo que llegaron a su fin con el oro más merecido de todos. Siete de siete para un equipo que tenía el escalón más alto del podio entre ceja y ceja y en la que estaban depositadas todas las esperanzas. Se cierra por fin la maldición a la vez que se abre un nuevo ciclo dorado.

La selección española de hockey hierba se colgó el oro en Barcelona

La selección española de hockey hierba se colgó el oro en Barcelona / RFEH

Lejos de quedarse con el ansiado oro, el waterpolo español ha mostrado que ha llegado para quedarse en lo más alto. La juventud y el talento que atesora el equipo de Miki Oca ya hacen soñar con el segundo oro mundial. Será el próximo año en Singapur.

Belgrado y Budapest serán las otras grandes citas antes de aterrizar a Los Ángeles en 2028. Para entonces, España ya no será una de las grandes favoritas a tener en cuenta. Será la selección a la que todos le querrán arrebatar el oro porque más de tres décadas después las Terré, Forca, Ortiz y compañía, sucedieron por fin a las Maragall, Barrio o Gabellanes. España está de vuelta a lo más alto.