HISTORIA SPORT: La vida sigue para los olímpicos (pese al coronavirus)

Dentro del seísmo de grado 4 que ha supuesto la irrupción en nuestras vidas de este virus con el que parece que tendremos que aprender a convivir durante las próximas semanas y meses (pocos, esperamos), existe un componente piscológico que sin duda debemos tener en cuenta. 

Hay un buen puñado de deportistas (muchos de ellos españoles, en quien nos vamos a centrar) que tienen ya el pasaporte para disputar los Juegos Olímpicos de Tokio. Japón, país fronterizo con China, principal foco del coronavirus, alberga la gran competición deportiva de este 2021. Una cita que se está viendo ‘ensuciada’ los últimos días por una sombra de posible suspensión que, obviamente, no ayuda a nivel mental a todos aquellos que han ‘hipotecado’ su temporada hacia el sueño olimpico.  

SIN ALTERACIONES

En SPORT hemos contactado con Lidón Muñoz (mínima en natación en la modalidad de 100 libre a refrendar en el Campeonato de España de abril) y con Dani Mateo (pasaporte asegurado para la prueba que se disputará en Sapporo tras ser décimo en el Mundial de Doha). Ambos tienen mente y planificación enfocadas totalmente hacia esa cita en tierras japonesas, que representará su primera participación en el gran sueño de todo deportista, los Juegos. “Creo que se está creando mucha alarma y ha habido muchas cosas antes (fiebre amarilla, vacas locas, el zika...) que han terminado pasando desapercibidas. Quedan muchos meses y cuando llegue el momento de empezar los Juegos nadie se acordará ya. Nadie de la Federación ni de ningún estamento nos ha informado de nada. Todo sigue igual”, nos comenta Mateo.

Lidón, por su lado, también tiene la cabeza puesta en llegar a tope a la cita olímpica. Su testimonio vale doble, puesto que está terminando la carrera de medicina y es una voz más que autorizada para tratar el tema: “Creo que todo el pánico que se está generando tiene parte de ‘culpa’ en el trato mediático y todo el bombo que se le está dando. Lo que asustaba a las autoridades en un principio es que se trata de una mutación nueva y no se conoce su comportamiento. Es un virus y un virus no tiene tan fácil tratamiento como una bacteria. Pero al final lo que estamos viendo es que tiene una tasa de contagio alta, pero una tasa de mortalidad muy baja y unos síntomas moderados. No hay que alarmarse; es verdad que hay que intentar evitar el contagio, pero saber a lo que nos estamos atieniendo. No es un ébola, que tenía una tasa de mortalidad muy alta”. 

OBJETIVO IRRENUNCIABLE

En el caso de Mateo la apuesta por Tokio es más ‘fuerte’ si cabe, puesto que un maratoniano tiene que prepararse exclusivamente para el Día-D mínimo con 3/ 4 meses de antelación (y, salvo casos especiales, no correr más de dos al año). “Queremos llegar bien a los Juegos y el tener el billete con tanta antelación nos da la oportunidad de llegar descansados y frescos. Mi próximo objetivo es el Mundial de Medio Maratón en Polonia, pero a partir de ahí todo irá en función de cómo me vea con los Juegos siempre en mente”. Dani se muestra muy explícito: “Mira, a mi toda esta psicosis que ha aparecido me va a venir hasta bien porque me iba a ir con mi chica unos días en abril y estoy contento de no haberlo cogido porque los precios han bajado muchísimo”. 

“Sobre el tema de los Juegos y esa posible suspensión sabemos lo mismo que vosotros, lo que leemos en un sitio y en otro. Ningún organismo nos ha comunicado nada. Yo voy a prepararme como vengo haciéndolo y en unos meses veremos”, sentencia la castellonense, reiterando su preocupación más por el tratamiento que se le está dando al asunto que por su impacto real a nivel científico. En definitiva, que los deportistas no hacen caso a todo el ruido externo que se está generando y siguen cada día levántandose con la salida del sol y realizando dobles sesiones interminables para llegar a tope a su gran sueño.