JUEGOS OLIMPICOS RIO 2016 - GIMNASIA RÍTMICA

¡Una plata que sabe a oro!

El equipo de gimnasia rítmica se ha hecho con la plata veinte años después de la última medalla en esta disciplina. El oro, cómo no, para Rusia y el bronce, para Bulgaria

Felicidad total en el equipo español de gimnasia rítmica

Felicidad total en el equipo español de gimnasia rítmica / EFE

Neus Yerro

Sandra Aguilar, Artemi Gavezou, Elena López, Lourdes Mohedano y Alejandra Quereda han sumado la décimoquinta medalla del deporte español en los Juegos de Río 2016

Una plata que sabe a oro... que fue, cómo no, para Rusia mientras el bronce se lo colgó Bulgaria en el Arena Olímpica de Río. 

Una plata que llega veinte años después de que las bautizadas como 'Niñas de oro' subieran a lo más alto del podio en Atlanta'96 y cuatro más desde que Carolina Pascual alcanzara el segundo cajón en la prueba individual en Barcelona'92.

El equipo español abrió la final olímpica en el Arena Olímpica al haber accedido a ésta en primera posición. Y lo hizo con un espectacular ejercicio de cintas, mejorando su puntuación de la clasificación y finalizando la rotación en la primera plaza porque sus rivales, entre ellos, Rusia, cometieron errores. Eran conscientes de que para desbancar a las rusas tenían que bordarlo. Y lo han hecho, poniéndose, una vez más, al público en el bolsillo.

Pero la defensora del título no había dicho aún su última palabra. La rítmica rusa cuenta sus participaciones por oros desde Sydney 2000. Y con un impoluto, perfecto ejercicio mixto (aros y mazas), se han encaramado al primer puesto aunque el público ha mostrado, con silbidos y abucheos, su disconformidad con la valoración de los jueces.

Y todavía ha habido que esperar hasta el concurso de Bielorrusia, primero, y Bulgaria, equipo que cerraba la competición, para conocer el color de la medalla de las discípulas de Sara Bayón y Anna Baranova, que, emocionadas, se fundían en un abrazo a la conclusión del ejercicio mixto del equipo.

Las bielorrusas han sido quintas mientras que Bulgaria, con la misma puntuación final que las españolas pero con unas décimas menos que éstas en la suma de sus notas de ejecución, tuvo que conformarse con el bronce.