REPORTAJES OLÍMPICOS SPORT

Rafa Nadal: "Me encanta ser campeón olímpico"

Rafa Nadal quiere resarcirse en Río de la decepción de Londres. Le emociona el deporte en sí y no imagina perderse la cita deportiva más importante

Rafa Nadal, con su oro olímpico de 2008

Rafa Nadal, con su oro olímpico de 2008 / sport

Neus Yerro

Rafa ha crecido en la cultura del deporte. Por eso para él, éste no se circunscribe a su propio ‘modus vivendi’ sino que muestra interés por otras disciplinas. En algunos casos, como en el fútbol, auténtica pasión. Tiene una <strong>visión global del deporte y de lo que implica</strong>. “A mí lo que me emociona es el deporte en sí, los valores que expresa”, confiesa y por eso mira con fruición hacia una cita especial, diferente, que se celebra cada cuatro años. “Los Juegos son más que deporte, son la máxima expresión del deporte, el evento más importante”, afirma sin 

dudar. 

Y eso que sólo ha podido vivir una solitaria experiencia olímpica, en 2008 en Pekín. Pero para él “fue inolvidable, compartiendo vida con otros deportistas españoles y con las grandes estrellas de otros deportes en la Villa Olímpica, conocer algo más de otras disciplinas... Los Juegos son algo muy especial”, rememora Nadal.

Su emoción al recibir la medalla de oro de manos de Juan Antonio Samaranch demuestran la importancia que Rafa da a ese galardón, que como el resto de sus trofeos, exhibe en el Museo del Rafa Nadal Sports Centre de Manacor, donde se ubica también la Rafa Nadal Academy, un proyecto que ilusiona no sólo al tenista sino a toda la familia. 

“Me encanta ser campeón olímpico. Para mí, ganar el oro en Pekín es uno de los logros más importantes de mi carrera”, sentencia.

Así se entiende que el golpe anímico que supuso para él perderse Londres 2012 fuera de los duros, de los que cuesta recuperarse. Además de defender su corona y hacerlo en el escenario que ha idolatrado desde niño, Wimbledon, iba a ser el abanderado español en la ceremonia de apertura. 

“Renunciar fue la decisión más dura de mi vida. Nada me sentó tan mal como perderme los Juegos de Londres”, repite una y otra vez cuando se le pregunta.

Así que<strong> estar en Río </strong>es una enorme ilusión ante una cita que sabe que es “un torneo distinto al resto” y un título que “es el más difícil de ganar porque sabes que tendrás una, dos y quizá con suerte, tres oportunidades en toda tu carrera para intentar conseguirlo”.

Una lesión en Roland Garros ha hecho sembrar de nuevo las dudas. Otra vez los fantasmas de 2012 sobrevolando a su alrededor. Y, como entonces, sabiendo que él será quien lleve la bandera en la ceremonia de apertura de Río 2016. “El tenis empieza el día después pero espero que el sorteo me dé descanso es día”, dice Rafa sonriendo. Y es que quiere disfrutar de estos Juegos “al máximo, en todas las facetas 

posibles”. 

Por eso tiene la intención, si su cuerpo no aconseja lo contrario, de disputar las tres disciplinas del tenis olímpico: individual, dobles (junto a su amigo Marc López) y mixto con Garbiñe Muguruza. ¿Dos campeones de Roland Garros compartiendo pista? “Una pareja muy buena”, califica.