Sánchez escenifica su propuesta sobre inmigración ilegal con un viaje a los países emisores en África

El Gobierno de Pedro Sánchez se enfrenta a un otoño caliente en la cuestión de la inmigración ilegal. Tanto en lo político (la oposición clama contra el aumento de llegadas y rechaza acordar el reparto de menores migrantes) como en lo práctico: se espera un aumento de llegadas de cayucos por la previsión de aguas calmadas entre el África occidental y Canarias. Podría haber hasta 150.000 personas preparándose para realizar el peligroso viaje por mar, según fuentes del Ejecutivo citadas por Reuters. El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha advertido a Sánchez de que el archipiélago recibirá en los próximos meses un nuevo “aluvión de pateras” y de que sus servicios de atención a migrantes ya están “colapsados”. El de Ceuta, Juan Jesús Vivas, ha vuelto a pedir “auxilio” este lunes tras un día de “enorme presión” migratoria. El Partido Popular aleja mientras la posibilidad de un acuerdo para reformar la ley de extranjería.

En este contexto, Pedro Sánchez arranca el curso político este martes con una gira de tres días por tres de los principales países emisores de inmigrantes hacia España desde el África Occidental: Mauritania, Senegal y Gambia. Los otros dos son Marruecos y Argelia.

Moncloa defiende que en el viaje se van a dar pasos firmes para reforzar el control de las salidas de cayucos y la lucha contra las mafias de tráfico de personas y el narcotráfico. España ya tiene agentes de la Guardia Civil y de la Policía y patrulleras desplegadas en esos países. Pero el Gobierno insiste en que la solución a la inmigración irregular debe ser holística e ir más allá del mero control fronterizo: hay que reforzar los lazos económicos para permitir el desarrollo de estos países emisores. Aboga por abandonar el “afropesimismo” y buscar oportunidades de crecimiento en una región joven y con un crecimiento del PIB por encima de la media mundial.

Por eso, subraya Moncloa, con el presidente estará también en este viaje el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, que presentará en el Instituto Cervantes de Senegal este miércoles un acuerdo bilateral de contenido económico. Y viajará con Sánchez el presidente de la empresa pública de satélites Hispasat, Pedro Duque, que llevará en la cartera proyectos para aumentar la conectividad rural a internet y la digitalización de las escuelas. 

La ministra de Migraciones, Elma Saiz, lidiará con la cuestión de las devoluciones de los inmigrantes que parten desde esos países. Aunque ya hay acuerdos al respecto, existe margen de mejora, apuntan fuentes del Gobierno. Pondrá el foco además en aumentar la capacidad de los programas de migración circular, que contratan en origen a inmigrantes de forma legal para períodos concretos de trabajo, antes de regresar a sus hogares. En 2023, se acogieron a este programa más de 17.400 trabajadores de seis países: Marruecos, Colombia, Honduras, Ecuador, Senegal, Argentina y Uruguay. Ahora se quiere ampliar la iniciativa a Mauritania y a Gambia.

Inestabilidad en el Sahel y aumento migratorio

Esta será la segunda visita este año de Sánchez al África Occidental. El número de inmigrantes irregulares que han llegado a Canarias ha aumentado este año un 154% con respecto al mismo período del año anterior: 21.620 personas en los primeros siete meses del año, según la agencia europea de fronteras Frontex. 

Fuentes de Moncloa ponen el foco en el descenso de este año con respecto al último semestre del año pasado. Entre julio y diciembre, llegaron a España 44.146 inmigrantes ilegales, frente a los 24.898 de este año hasta la fecha actual, según las últimas cifras dadas por esas mismas fuentes.

De esos inmigrantes, el mayor número proviene ahora de Malí. El país es el epicentro de una crisis que asola a otros países del Sahel, como Níger o Burkina Faso. A la amenaza yihadista y a la guerra civil se respondió con golpes de Estado en los tres países. Rusia aprovechó la situación y ofreció los servicios de sus soldados de fortuna a las nuevas juntas golpistas. El resultado ha sido más de tres millones de personas desplazadas. Dos de los países que visita Sánchez, Senegal y Mauritania, tienen frontera con Malí.

Agenda de Sánchez en Mauritania, Senegal y Gambia

La gira de Sánchez por África comienza este martes a mediodía en Nuakchott, la capital de Mauritania. La república islámica es un país enorme, dos veces España, pero esencialmente desértico y habitado por tan solo 4,6 millones de habitantes. El control de la inmigración en un territorio tan grande es muy complicado. Es uno de los principales puntos de salida de la llamada ruta canaria de la migración ilegal.

La situación se ha agravado por la presencia de cerca de 200.000 refugiados malienses, que huyen de los golpes de Estado, la guerra y el yihadismo que asola el Sahel.

Pedro Sánchez ya viajó en febrero a Mauritania, junto con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. Juntos anunciaron una lluvia de millones para ayudar al país, clave en el control migratorio: 210 millones directos de la UE y 300 millones por parte de España en inversiones de distinto tipo. Sánchez se volverá a ver este martes con el presidente, Mohamed Ould Ghazouani. Está previsto que se lance el comité bilateral empresarial hispano-mauritano, en el que participarán empresas mauritanas y el sector público español, con especial presencia de autoridades del sector empresarial canario, según Moncloa.

El miércoles, Sánchez se desplaza a Gambia. Es el primer viaje de un presidente de Gobierno español a este pequeño Estado rodeado por Senegal de tan solo 2,7 millones de habitantes. Allí visitará al destacamento de la Guardia Civil y de la Policía española en el puerto de Banjul, la capital, donde cooperan con las autoridades locales en el control migratorio. Sánchez se verá con el presidente gambiano, Adama Barrow. El Gobierno subraya que sobre la mesa estará la cuestión migratoria y la lucha contra las mafias de tráfico de personas que se han hecho fuertes en el país y que hacen llegar a los inmigrantes a las costas españolas.

Ese mismo día, por la tarde, Sánchez aterriza en Dakar, la capital de Senegal, para comenzar la tercera y última etapa de su gira presidencial. En el Instituto Cervantes, Sánchez y su ministro de Economía, Carlos Cuerpo, presentarán la iniciativa de cooperación Africa Avanza.

El jueves, el presidente tendrá un encuentro con las empresas españolas en Senegal y comenzará la etapa de mayor relevancia política del viaje, con el primer encuentro con el nuevo Gobierno del país. Se verá tanto con el recientemente elegido primer ministro, Ousmane Sonko, como con el presidente Bassirou Diomaye Faye. 

El país vivió el año pasado un período de tensión política y represión policial que acabó con decenas de muertos, y al que parece haber puesto fin con la alternancia en el poder tras unas elecciones limpias. El nuevo Ejecutivo tiene tintes más anticolonialistas y panafricanistas que el anterior, pero el Gobierno asegura que no ha recibido ninguna señal de que pretenda terminar con la colaboración de la Guardia Civil y la Policía españolas presentes en el país para luchar contra la salida irregular de migrantes.