Tensión en Venezuela

La oposición asegura contar con actas que convierten a González Urrutia en ganador de las elecciones por dos millones de votos de diferencia

Maduro denuncia dos veces en un mismo día que existe un intento de "golpe de Estado" en su contra

La líder de la oposición de Venezuela, María Corina Machado, y el candidato presidencial, Edmundo González Urrutia

La líder de la oposición de Venezuela, María Corina Machado, y el candidato presidencial, Edmundo González Urrutia / Jeampier Arguinzones/dpa

Abel Gilbert

Abel Gilbert

Venezuela ha abierto su caja negra y se encontró otra vez con el conflicto político. Nicolás Maduro fue proclamado presidente para un nuevo período que se inicia el año que viene por el Consejo Nacional Electoral (CNE). No solo sonaron cacerolas en varias partes de Caracas para repudiar la ceremonia, sino que comenzaron otra vez las protestas que en esa ciudad adquirieron circunstancias dramáticas siete años atrás. Maduro reiteró por la noche que la oposición alienta un "golpe de Estado" en connivencia con Gobiernos extranjeros. "Detrás de este plan están los gringos. Siempre han estado. Antes, durante y después de (Juan) Guaidó. Made in USA. Son planes y este plan lo vivieron trabajando ellos". Las personas capturadas por la policía estaban "drogados" y tenían armas. "Son grupos delincuenciales, con órdenes precisas de dónde atacar. Están intentando tomar este punto para iniciar una escalada y no lo vamos a permitir".

Apenas unas horas antes, María Corina Machado había asegurado que Edmundo González Urrutia es el "presidente electo" en virtud de las "verdaderas actas" electorales que la oposición asegura poseer en más de un 73% del total. Según Machado, González Urrutia obtuvo 6,25 millones de votos contra 2,28 millones del actual mandatario. Se trata de una brecha de tres millones de sufragios.La diferencia, agregó Machado, "fue aplastante en todos los estados, en todos los estratos, en todos los sectores les ganamos". "Aunque el CNE le pusiera el 100% de los votos a Maduro no alcanzaría", dijo y consideró que esa es la razón por la cual "el régimen durmió muy preocupado" en la madrugada del 29 de julio. Si el organismo electoral entrega las "verdaderas actas, las que nosotros tenemos, tendrán que rectificar". La dirigente de derechas prometió subir a una página de internet todos los documentos. "Hay varios líderes globales que ya están consultando el portal web con las pruebas de la victoria. Ya la está comprobando el mundo", señaló, en una constatación de que Venezuela se ha constituido en un asunto que rebasa sus fronteras. "Aquí hay una realidad que ha quedado comprobada. Le queda al CNE responder".

De otro lado, Machado justificó las primeras protestas que dejaron algunos heridos y detenidos en la capital. "Estamos viendo expresiones de ciudadanos que se resisten a que les roben el futuro. Son expresiones espontáneas en zonas populares. Expresiones legítimas frente a un régimen ilegítimo". A su vez, anunció que la oposición organizada también ocupará el espacio público para exigir que el CNE recuente las actas en su poder. "Queremos convocar a reunirnos en asambleas populares en todas las ciudades de Venezuela".

 A su lado, González Urrutia no dejó de asentir ante cada afirmación de la dirigente de Vente Venezuela. Más tarde le tocó el turno de sus propias definiciones políticas. "Nuestro triunfo es histórico, ganamos en lugares donde nunca habían ganado las fuerzas democráticas en los últimos 25 años. Esperamos que se respete a cada uno de los millones de venezolanos que salieron a votar. Vamos a luchar por nuestra libertad. Nuestra respuesta será de calma y firmeza".

El candidato de la Plataforma de Unidad Democrática (PUD) que, de acuerdo con el CNE consiguió un 44% de las adhesiones en los comicios, dijo comprender la "indignación" que empieza a hacerse sentir en la calle. Sin embargo, llamó a la calma. "Venezuela desea paz. Es fundamental que las autoridades expresen esa voluntad expresada en las urnas". Para el exdiplomático de 74 y un habla cansina, el "anuncio prematuro" de los resultados "no solo muestra un liderazgo irresponsable. Son afectaciones graves en un proceso electoral".

Reacción oficial

"Llegó la hora de defendera la paz, calle por calle", dijo el presidente en un mensaje televisivo. El madurismo también ha tomado la decisión de manifestarse en defensa de los resultados oficiales. Jorge Rodríguez, el presidente de la Asamblea Nacional (AN), jefe de la reciente campaña electoral y tradicional negociador con los adversarios del Gobierno, convocó a los militantes del Partido Socialista Unificado (PSUV) a marchar este martes hacia el Palacio de Miraflores. "Para ellos las elecciones son una oportunidad para la violencia. No lo vamos a permitir. Convocamos a todo nuestro pueblo a grandes marchas para celebrar la victoria y defender la paz. Somos la mayoría".

Rodríguez dijo además que todavía persiste el "hackeo" contra las instalaciones informáticas del CNE que no ha permitido la transmisión del 100 % de los resultados de los comicios. El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, sostuvo que las demoras del domingo fueron consecuencia de una acción externa que habría sido realizada "desde Macedonia del Norte, y habría tenido la intención de manipular los datos" que recibía el organismo. Saab, una de las principales espadas del madurismo, dijo además que esa maniobra apunta contra Machado y dos integrantes de Voluntad Popular, Leopoldo López y Lester Toledo, ambos fuera de Venezuela. "Esta acción fue detenida, fue evitada, pero lograron pausar" la recepción de datos. "Ellos no querían ralentizar sino adulterar las actas de transmisión del sistema". Saab ha abierto una investigación y advirtió que la fiscalía general está alerta ante eventuales convocatorias "de un sector radical con un largo historial de llamados a la insurrección" en las próximas horas. Los potenciales participantes podrían ser imputados por los delitos de instigación pública, obstrucción de vías públicas, instigación al odio y resistencia a la autoridad.

Peticiones internacionales

En este contexto, Human Rights Watch (HRW) instó este lunes a los Gobiernos a no reconocer los resultados de las elecciones venezolanas "hasta que no se hagan públicas todas las actas electorales y se comuniquen a la oposición". Por su parte, la Organización de los Estados Americanos (OEA), de la cual Caracas se ha separado voluntariamente años atrás, llamó una reunión extraordinaria en Washington para abordar la situación que ya es un problema regional, y no solo por la decisión del Gobierno de Maduro de expulsar personal diplomático de Argentina, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay por "injerencia" en los asuntos internos. 

 En este contexto, Maduro recibió Celso Amorim, el asesor en política internacional del presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva. De acuerdo con el diario paulista ´Folha`, que cita a interlocutores de quien fue exministro de Exteriores de Lula también, durante la reunión Amorim pidió a su interlocutor que el CNE publique las actas de votación de las elecciones. Maduro justificó la reticencia el domingo debido al supuesto ataque de hackers. Brasil, tanto como Chile y Colombia hicieron públicamente ese reclamo en las primeras horas del lunes. En esa misma dirección se pronunciaron Estados Unidos y la UE. Maduro contó con el respaldo de China, Rusia e Irán, además de Cuba, Nicaragua y Bolivia.