Crisis política en Francia

Macron acepta la dimisión del Gobierno en pleno, que seguirá en funciones hasta que se pacte el nuevo ejecutivo

La cúpula del Gobierno se mantendrá en funciones hasta que las fuerzas políticas lleguen a un acuerdo para formar un nuevo ejecutivo

El primer ministro francés, Gabriel Attal.

El primer ministro francés, Gabriel Attal. / EP

Leticia Fuentes

El primer ministro francés, Gabriel Attal, y 17 ministros más, comunicaron este martes su dimisión al presidente Emmanuel Macron durante el Consejo de Ministros celebrado en el Palacio del Elíseo. La razón de esta dimisión clave llega a 48 horas de la primera sesión de la Asamblea Nacional ya que, según el artículo 23 de la Constitución francesa, no se puede ser miembro del Gobierno y del Parlamento al mismo tiempo; es decir, los ministros que han sido escogidos como diputados en las elecciones legislativas no pueden combinar su actual puesto con el de diputado, como tampoco podrían participar en la votación de la nueva presidencia de la Asamblea Nacional el próximo jueves. Se trata de unos votos necesarios para el campo presidencial en la búsqueda por salir del bloqueo parlamentario.

Después de anunciar la dimisión en bloque, el presidente Macron la ha aceptado, a pesar de negársela en un primer momento a Attal hace unos días. La cúpula del Gobierno se mantendrá en funciones hasta que las fuerzas políticas lleguen a un acuerdo para formar un nuevo ejecutivo. Estando en funciones, los miembros del Ejecutivo sí pueden ejercer como diputados en la Asamblea Nacional, aunque dicho gobierno no puede presentar nuevos proyectos de ley.

"Podríamos haber desaparecido. Hemos evitado lo peor. El futuro debe escribirse. Y sé, señor presidente de la República, por conocer a las mujeres y a los hombres alrededor de esta mesa, que todos tienen a Francia en el corazón y que la llama nunca sale para aquellos que quieren servir a los franceses", declaró Attal durante la reunión ministerial. Macron, por su lado, también ha querido dirigirse a la mayoría saliente durante la reunión instándoles a desarrollar "una propuesta" con vistas a "una coalición mayoritaria o un pacto legislativo amplio".

Este martes, el ministro del Interior, Gérald Darmanin, pidió al campo presidencial "trabajar con Los Republicanos", la derecha tradicional, para salir del bloqueo político que persiste 10 días después de las legislativas, y a menos de dos semanas de los Juegos Olímpicos de París. Precisamente, Darmanin es una pieza clave en la organización del dispositivo de seguridad de los Juegos, de ahí que permanezca en funciones, al menos, hasta el 8 de septiembre, último día de los Paralímpicos.

Macron aboga por un pacto legislativo

"La responsabilidad de la mayoría saliente es poner sobre la mesa una propuesta con vistas a una coalición mayoritaria o a un pacto legislativo amplio", afirmó el presidente frente a sus ministros este martes en el Consejo de Ministros celebrado en el Palacio del Elíseo, abriendo la puerta a una nueva fórmula política: el pacto legislativo.

Un pacto legislativo con las fuerzas moderadas supondría un acuerdo formal entre diferentes partidos políticos o grupos parlamentarios con el objetivo de colaborar en la aprobación de leyes y en la gestión política de la Asamblea. Dicho pacto ayudaría al Gobierno a alcanzar la mayoría parlamentaria y reestablecer la estabilidad política, al menos hasta el fin de la legislatura que tendrá lugar en 2027.

El antiguo grupo Los Republicanos de la Asamblea Nacional, rebautizado como La Derecha Republicana, estaría desarrollando un "pacto legislativo", según su presidente. "Asumo mis responsabilidades: no dejaremos que La Francia Insumisa tome el poder", declaró Laurent Wauquiez en 'Le Figaro', el pasado lunes. Una declaraciones que llegan tras el cese de las negociaciones entre las izquierdas.

La Francia Insumisa

En los últimos días, la lista de posibles candidatos a primer ministro no ha dejado de crecer. Desde Olivier Faure, pasando por Clemence Guetté hasta Huggette Bello, aunque esta semana ha empezado a sonar una nuevo nombre: Laurence Tubiana, como alguien "muy macron-compatible", dicen desde el Nuevo Frente Popular. Aunque, el diputado socialista, Boris Vallaud, rechaza esa compatibilidad: "Laurence Tubiana, ¿Macron-compatible?, ni siquiera sé lo que eso significa. Ella rechazó ser ministra de Emmanuel Macron, y ahora acepta ser primera ministra del Nuevo Frente Popular".

El perfil de Tubiana encajaría en la idea de una primera ministra moderada. Es una prestigiosa economista de 73 años y exembajadora para las negociaciones de la COP21, en París en 2015, quien consiguió un importante reconocimiento por su trabajo en políticas climáticas y desarrollo sostenible.

A pesar de su imponente currículum, La Francia Insumisa rechazó su candidatura y abandonó momentáneamente la mesa de negociaciones, acusando al Partido Socialista de llevar al Nuevo Frente Popular a "un callejón sin salida". "Nuestra decisión es la siguiente: exigimos una candidatura única a la presidencia de la Asamblea Nacional y no retomaremos ninguna discusión sobre nada más hasta que esto se resuelva", decía el líder insumiso, Jean-Luc Mélenchon. Tras horas del cese del diálogo entre las formaciones de izquierdas, este martes, el Nuevo Frente Popular consiguió llegar a un acuerdo sobre "una candidatura única" a la presidencia de la Asamblea Nacional, tal y como aseguró el socialista Olivier Faure. Un acuerdo que permite retomar la segunda parte de las negociaciones centrada en la búsqueda de un candidato a primer ministro.

Se trata de una semana crucial para la política francesa, en la que los sindicatos ya ha organizado una concentración frente a la Asamblea Nacional coincidiendo con la sesión de apertura de este jueves para "exigir un gobierno de izquierdas", dicen, y presionar a sus dirigentes para que encuentren la fórmula que saque a Francia del bloqueo político.