Crisis venezolana

El cuestionamiento de los expertos de la ONU de las elecciones venezolanas profundiza el descrédito internacional de Maduro

El ministro venezolano de Exteriores dice que el informe divulgado es "mentiroso" y acusa a la comitiva de la ONU de haberse reunido con funcionarios norteamericanos

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y el presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Elvis Amoroso

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y el presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Elvis Amoroso / Zurimar Campos/Prensa Miraflores / DPA

Abel Gilbert

Abel Gilbert

La credibilidad de las elecciones que dieron la victoria a Nicolás Maduro se erosiona más con el paso de los días. El comité de expertos de la ONU ha profundizado la desconfianza al trabajo del Consejo Nacional Electoral (CNE). A 17 días de la contienda, sostuvo la delegación especialmente invitada por Caracas, "el Consejo Nacional Electoral no publicó, y aún no ha publicado, ningún resultado para respaldar sus anuncios orales". Las conclusiones han sido demoledoras. "El proceso de gestión de resultados por parte del CNE no cumplió con las medidas básicas de transparencia e integridad que son esenciales para la realización de elecciones creíbles". Y algo más grave: "tampoco siguió las disposiciones legales y regulatorias nacionales, y todos los plazos establecidos fueron incumplidos".

Como era de esperar, el ministerio de Exteriores puso el grito en el cielo. El titular de esa cartera, Yván Gil, dijo que el informe en cuestión difunde "una serie de mentiras, violando en contenido y método, los principios que rigen el funcionamiento de los grupos de expertos". Calificó a su vez de "imprudente", "poco ética" e "irresponsable" la posición de la comitiva que observó la contienda porque "mina la confianza en los mecanismos diseñados para la cooperación y asistencia técnica" en esos procesos. Gil reprocha a su vez que sus integrantes mantuvieron contactos con funcionarios del Departamento de Estado norteamericano. Señaló en ese sentido que el documento de los expertos es el resultado de "instrucciones" dadas por Washington.

Miradas convergentes

Más allá del malestar manifiesto de Gil, el documento de la ONU no hizo más que compartir los criterios del Centro Carter, lo que representa a un golpe a la política que se trazó el Gobierno para afrontar las elecciones. Después de revocar la invitación a la UE para observar los comicios, el madurismo confió en compensar esa ausencia con la pericia de esas dos entidades. Los argumentos que ofrecieron ambas sobre las anomalías de los comicios no hicieron más que engrosar las sospechas hacia la imparcialidad del CNE que tiene la misma oposición. Según la ONU, "el anuncio del resultado de una elección sin la publicación de sus detalles o la divulgación de resultados tabulados a los candidatos no tiene precedente en elecciones democráticas contemporáneas".

El presidente de la Asamblea Nacional (AN), Jorge Rodríguez, encargado de las negociaciones con la oposición, propuso que el Parlamento reforme la ley electoral para que "nunca más ningún extranjero venga a tomar posición sobre nada que tenga que ver con las elecciones en Venezuela. ¿Por qué tienen que venir? ¿A cuenta de qué? ¿Qué tipo de capacidad tienen?".

El texto de los expertos de la ONU no se aparta sustancialmente de los reparos que, con otras palabras, mucho más amables, vienen formulando Brasil, México y Colombia, los tres países que intentan mediar en el conflicto interno venezolano pero que consideran a la vez indispensable que el CNE divulgue públicamente y desglosadas las actas de la contienda "por mesa de votación". Celso Amorim, asesor de Luiz Inacio Lula da Silva en asuntos internacionales, propuso que se vuelvan a realizar las elecciones para encauzar el conflicto interno venezolano, una sugerencia indigerible para Maduro. También otros países, entre ellos España, entablan contactos con el Palacio de Miraflores y la oposición para buscar una salida política.

Lula y Petro conversaron este miércoles sobre la actualidad venezolana pero se desconoce el contenido de ese encuentro teleónico. El mexicano Andrés Manuel López Obrador dijo este martes que los tres países esperarán la decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) venezolano sobre los comicios para emitir una nueva declaración conjunta. La máxima instancia judicial, que en todos estos años funcionó como un apéndice del Palacio de Miraflores, se ha arrogado la potestad de dar la "última palabra" sobre las elecciones de la discordia. El TSJ a su vez ha declarado en "en desacato" al candidato Edmundo González Urrutia por no haberse acudido a la audiencia en la que debía presentar las actas que tiene la oposición en sus manos. Según la líder de ese espacio, María Corina Machado, la Plataforma Democrática Unitaria (PUD) cuenta con el 80% de esos documentos que acreditan una contunente victoria de González Urrutia.

Endurecimiento

La oposición redoblará este fin de semana sus esfuerzos en las calles para forzar una salida de la crisis. Maduro, en tanto, se apuntala en el control que tiene del Estado, el rol guardián que desempeñan las Fuerzas Armadas y la capacidad de movilización de su partido, el Socialista Unido de Venezuela (PSUV).

Las protestas contra los resultados oficiales de los comicios han provocado 25 muertos, 192 heridos y más de 2.400 detenidos, según balances oficiales, esta vez llamativamente coincidentes con los de organismos defensores de derechos humanos cuyo funcionamiento el Gobierno busca limitar.

En este contexto, el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Volker Türk, pidió a las autoridades venezolanas que rechace la iniciativa parlamentaria que apunta a regular el funcionamiento de las organizaciones no gubernamentales y de las redes sociales a las que el Ejecutivo considera como "multiplicadores del odio y el fascismo". Esa definición le cupo a WhatsApp e Instagram, pero también a la china TikTok. Maduro es un aliado de Pekín. "Insto a las autoridades a que no adopten estas u otras leyes que socavan el espacio cívico y democrático en el país".