Muerte

Descubren los restos del último de los cinco desaparecidos en Honduras a finales de junio

El último cuerpo corresponde a Elvis Izaguirre, que presumiblemente perdió la vida al mismo tiempo que los demás desaparecidos

Un policía en Honduras.

Un policía en Honduras. / Shutterstock

EFE

La última persona de las cinco que habían desaparecido en Honduras el 23 de junio en las cercanías de Tegucigalpa, fue hallada muerta este lunes, lo que también ocurrió con las otras cuatro el pasado viernes, informó la Policía Nacional.

El último hallazgo sería el de Elvis Izaguirre, quien se suma a la pareja que formaban Alberto Coleman y Annie Rachel Villatoro; Alejandro Enrique Aceituno y Kennet Gabriel Cruz, cuyos restos mortales fueron localizados el viernes entre Tatumbla y El Zamorano, en una zona montañosa entre 20 y 30 kilómetros al este de Tegucigalpa.

Los restos de la quinta persona hallada hoy, por su avanzado estado de descomposición, fueron trasladados a Tegucigalpa en un helicóptero de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH) y luego remitidos a Medicina Forense de la Fiscalía. La entrega a sus familiares se hará el martes, dijo a los periodistas una fuente de la Fiscalía.

Los cuatro hallados el viernes fueron entregados el domingo a sus familiares y de inmediato fueron sepultados en un mismo cementerio de la capital hondureña.

Las cinco personas asesinadas desaparecieron en el barrio Mirador de Oriente, de Tegucigalpa, donde la pareja de Alberto Coleman y Annie Rachel Villatoro tenía previsto alquilar una casa, a lo que se opusieron cinco individuos que fueron detenidos el 24 de junio, que serían miembros de la pandilla M-18, porque la querían ocupar ellos, según el ministro de Seguridad, Gustavo Sánchez. Los tres restantes eran amigos de Coleman y Villatoro, a quienes le estaban ayudando a trasladarse a otro sitio en un vehículo que después fue hallado por las autoridades.

Las llaves del coche y un teléfono de la pareja los tenían los cinco detenidos el 24 de junio, quienes estarían enfrentando un juicio por rapto y asesinato, según las autoridades del país centroamericano.