Posible acción antisemita

Francia investiga como posible acto terrorista el ataque contra una sinagoga en el sur del país

Las autoridades hallan una bombona de gas en un vehículo afectado por la explosión, por la que ha resultado herido leve un policía

Un agente de la Gendarmería francesa.

Un agente de la Gendarmería francesa.

Leticia Fuentes

Leticia Fuentes

La fiscalia antiterrorista abrió este sábado una investigación tras el ataque a la sinagoga de la localidad de La Grande Motte, en Hérault, sur de Francia, que provocó un incendio e importantes destrozos, según informó el ministro del Interior en funciones, Gérald Darmanin. Como consecuencia, un polícia municipal resultó herido, aunque su estado no reviste gravedad.

Hasta el lugar se desplazaron varias unidades de bomberos y la gendarmería tras el aviso de una explosión de varios vehículos frente a la sinagoga, que afectaba a las puertas principales del edificio. Al llegar a la zona, las autoridades hallaron una bombona de gas en uno de los coches, algo que hace sospechar a los agentes de que se trataría de un ataque intencionado contra la comunidad judía.

El ministerio públic ha abierto una investigación por los presuntos delitos de intento de asesinato, destrucción con medios peligrosos y asociación de malhechores, todos con motivaciones terroristas. Afortunadamente, esta mañana no se estaban realizando servicios religiosos en la sinagoga. Esto explica por qué, aparte de un agente de policía, nadie más resultó herido.

El presidente francés, Emmanuel Macron, calificó el ataque de "acto terrorista" y aseguró que "la lucha contra el antisemitismo" es un combate diario. "Quiero asegurar a nuestros conciudadanos judíos y a la comunidad todo mi apoyo", añadió Darmanin.

El autor de los hechos aún no ha sido detenido pero, según las autoridades, "se están movilizando todos los medios para encontrar al autor". El prefecto de Hérault también quiso condenar el ataque y comunicó que se reforzará la seguridad de los intereses judíos en el departamento. 

Durante toda la mañana, distintas personalidades del mundo de la política reaccionaron al ataque con firmeza, como la ex primera ministra Élisabeth Borne, quien afirmó que "el antisemitismo no tiene cabida en nuestra República". También el expresidente François Hollande denunció en un comunicado que "cuando se ataca una sinagoga, el objetivo es toda Francia". "El antisemitismo debe ser denunciado y combatido de forma unánime", añadió.

El primer ministro en funciones, Gabriel Attal, y el ministro del Interior, Gérald Darmanin, visitarán el lugar esta tarde. Junto a ellos, en La Grande Motte, estarán la secretaria de Estado de Ciudadanía, Sabrina Agresti-Roubache, y Patricia Mirallès, secretaria de Estado del Ministro de las Fuerzas Armadas, encargada de los Veteranos y de la Memoria.

La mayor comunidad de Europa

Francia cuenta con la comunidad judía más grande de Europa, unas 600.000 personas, que conviven con unos 5,4 millones de musulmanes residentes en el país galo. Unos números que obligan al Gobierno a estar con un ojo vigilante puesto en casa y otro en Oriente Próximo, tras el estallido del conflicto entre Israel y Hamás.

En 2023, el Servicio de Protección de la Comunidad Judía (SPCJ) y el Ministerio del Interior registraron 1.676 actos antisemitas. Casi el 60% de ellos hirieron a las personas y, en la mayoría de los casos, adoptaron la forma de gestos y comentarios amenazantes. 

Desde el 7 de octubre, día del ataque de Hamás al territorio israelí, la cifra de agresiones a la comunidad judía se ha disparado con un aumento de más del 1.000%. De ahí que, en los últimos meses, Francia haya reforzado nuevamente la seguridad de lugares de culto o instituciones judías con la presencia de policías de manera permanente .