El Barça se proclama campeón de la OK Liga

El Barça Lassa consiguió ayer su trigésima liga de la historia al imponerse al Igualada  (1-5) a falta de cuatro jornadas para el final.  Se convierte así en el claro dominador de la competición con 20 de las 22 últimas ligas reinando en las vitrinas del Palau.

Los de Edu Castro ponen así el broche de oro a una temporada en la que no han perdido ningún partido, algo que no sucedía desde hacía 41 años. Se trata de la segunda vez que lo consiguen en la historia, gracias a los  72 puntos que han sumado  ya en la jornada 26.

Tan solo han cedido tres empates, ante Noia Freixenet (2-2),  Reus (4-4) y Lleida Lista (3-3). Con 56 puntos y un partido menos, su perseguidor, el Liceo, se queda sin opciones matemáticas de conseguir un título que los azulgrana han ganado por sexta vez consecutiva. El equipo de Edu Castro es además el máximo goleador y el conjunto menos goleado, con 16 puntos más que su principal rival esta temporada, el Deportivo Liceo. A nivel personal, quien sigue batiendo récords es Aitor Egurrola que iguala, con 71 títulos al mítico David Barrufet.

A por la victoria

La Liga pasaba por ganar en la pista del Igualada Rigat y los azulgrana salieron son ese objetivo desde el primer minuto acosando la portería local. La recompensa no tardaría en llegar y Joao Rodrigues abrió el marcador a los nueve minutos de partido. Estuvo rápido el portugués para cazar un chute de Marc Gual y abrir la lata. Poco después, sin apenas descanso para Elagi Deitg,  Ignacio Alabart inauguraba su cuenta par ticular con un remate dentro del área. Tras ese tanto,  llegó la reacción local y el gol de Baliu, pero en la siguiente jugada, Alabart volvió a poner distancia en el luminoso para irse al descanso con dos goles de ventaja.

En la reanudación, el Barça continuó con su dominio sin dar opciones al Igualada. Ya en la recta final, Pau Bargalló anotó el gol de la tranquilidad que certificaba media liga. Pero aún tuvo tiempo Alabart de firma un ‘hat trick’  para cerrar el encuentro con broche de oro. Cinco goles en un encuentro, los mismo que promedia el conjunto azulgrana esta temporada, y tan solo uno en contra, también igual que en toda la campaña lo que certifica la regularidad de un conjunto que no tiene rival en la competición nacional.