Una temporada con Gazzaniga

Hace poco más de un año que Paulo Gazzaniga aterrizaba en Girona. Lo hacía el último día de mercado de verano como recurso de última hora para completar la portería después de un verano donde el club no había podido encontrar un segundo portero para la plantilla.

El Girona también dinamita sus registros goleadores históricos

El adiós de Adrián Ortolá había dejado solo a Juan Carlos a la espera de un repuesto que no llegó hasta el último día del mercado. Antes, se llamó a la puerta, sin éxito, de Diego López, Álvaro Fernández, Rossi, Dituro y algún otro. Finalmente, Gazzaniga, que había coincidido con Míchel en el Rayo (16-17) y que no tenía minutos en el Fulham fue el elegido.

Llegó tarde y sin conocer a sus compañeros. Con treinta años le avalaban una veintena de partidos con el Tottenham, la experiencia en Primera con el Elche (20-21) y una internacionalidad absoluta con Argentina. Sin embargo, había muchas incógnitas porque el público le tenía poco visto.

Casi catorce meses después, Gazzaniga es indiscutible bajo palos en Montilivi. El guardameta argentino aprovechó la mala racha inicial del equipo del curso pasado donde Juan Carlos cometió varios errores para entrar en el once y ya no ha salido. “Quería cambiar la dinámica del equipo”, argumentaba Míchel tras el primer partido de Gazzaniga ante Osasuna.

Desde entonces, el argentino se ha consolidado como el guardameta titular del Girona, con quien el pasado domingo ante el Almería, cumplió su treinta y octavo partido y, por tanto, encadenado una temporada de titular. El curso pasado encajó treinta y siete goles en veintiocho partidos. Esta temporada ha recibido trece en las nueve jornadas disputadas.