Martí y Unzué, trayectorias paralelas

A mediados de octubre, y con el Girona dando tumbos sin apenas reaccionar, en Montilivi se tomó una decisión. Se aposto por la destitución de Juan Carlos Unzué. Duró doce partidos en el cargo. Justo los que acaba de completar su sucesor, Pep Lluís Martí. Fichado con el fin de convertirse en el revulsivo que necesitaba la plantilla, la realidad confirma que el cambio de entrenador no ha dado sus frutos. 

Al menos todavía. Los números de uno y otro son prácticamente calcados. Con Unzué se ganaron cinco partidos. Los mismos que con el balear. Eso sí, el número de derrotas fue mayor: seis. Con Martí se han perdido cuatro partidos, un par menos. El balance es muy parejo. De 32 puntos, el actual inquilino del banquillo en Girona ha cosechado 18. 

Lo que se traduce en un 56 por ciento. Unzué logró 16 de 32, la mitad. Con eso bastó para ser cesado. Entre uno y otro, el paréntesis que lideró Juan Carlos Moreno, quien vivió un partido desde el banquillo: 0-0 ante el Alcorcón. Unzué se marchó dejando al equipo a cuatro puntos del ascenso directo. Ahora, la segunda plaza está a diez puntos.