La décima llegó en Pamplona con una remontada de Champions

Los de Míchel dieron la vuelta a un partido que se había puesto cuesta arriba de la mano de un Sávio estelar y un Dovbyk determinante

Osasuna puso contra las cuerdas a un Girona que supo rehacerse y sufrir cuando más lo necesitaba

Resumen, goles y highlights del Osasuna 2 - 4 Girona de la jornada 12 de LaLiga EA Sports

Albert Briva

Albert Briva

El Sadar amenazaba con volver a ser la 'kryptonita' de un Girona que bajo la lluvia de Pamplona se marcó una remontada de mérito supremo para volver a reinar en LaLiga. Cuando peor estaba el equipo, cuando el Girona parecía estar perdido ante un Osasuna que supo dar la vuelta al magnífico inicio de los de Míchel, surgió la reacción de un equipo que volvió a demostrar su merecida realidad.

Lo tenía claro Míchel en la previa del partido cuando aseguraba que la visita a El Sadar serviría para medir la realidad de los objetivos del equipo. Tan claro como el planteamiento con el que tenía que salir para poder desbordar a un Osasuna que se vio superado por las bandas. Savinho y Miguel fueron un quebradero de cabeza para el conjunto rojillo y en especial para Areso, que era incapaz de frenar las arrancadas del brasileño.

Y para nada iba equivocado Míchel en su idea. Tras avisar con un primer centro rematado por Yangel Herrera, Savinho rompió líneas con una cabalgada imperial para iniciar una triangulación que acabaría con el centro de Dovbyk y el posterior remate a placer de Iván Martín, que pondría la justicia en el marcador en el minuto 15.

Dóvbyk marcó el gol del empate en El Sadar

Dóvbyk marcó el gol del empate en El Sadar / AFP

Osasuna se rehizo bien pronto pese a no haber inquietado hasta entonces la portería de un Gazzaniga, que no pudo rechazar de manera óptima un disparo desde la frontal de Moi Gómez, que aprovecharía para rematar a placer Ante Budimir, que se convertiría en la gran pesadilla de la defensa gerundense a lo largo de todo el partido.

Osasuna sufría por la banda izquierda, pero hacía daño por la derecha, donde Couto y Arnau sufrían las subidas de Mojica y la participación de un Aimar Oroz que empezaba a hacerse notar en el partido.

Fue el mismo Aimar quien cerca estuvo de decantar la balanza a favor de los suyos al filo del descanso, aprovechando los mejores momentos de Osasuna, ante un Girona que había ido a menos y no encontraba la manera de romper a los navarros. La presión de los de Arrasate ahogaba la salida de balón y solo la velocidad de Savinho le valía al Girona para coger aire.

El partido se tomó un descanso tras una primera mitad de dinámicas cambiantes.

Papeles cambiados

La segunda mitad empezaba con la misma tónica que se marchaban los jugadores al descanso. Osasuna seguía apretando en busca de un gol que volvió a encontrar de la mano de Mojica y Budimir. El colombiano desbordó por banda derecha para encontrar la cabeza del delantero croata, que ajustó el balón a la cepa del poste de Gazzaniga.

Los de Arrasate habían conseguido lo más difícil ante un Girona que parecía perdido sobre el césped de El Sadar. Pero el guion del partido tenía preparado otro giro radical. Tras varios minutos de tanteo en los que el Girona empezó a recuperar sensaciones, otra vez la banda izquierda de los de Míchel surtió efecto. Inició Savinho, centró Miguel y remató el hombre del partido. Dovbyk le ganó la partida a David García y puso el empate para volver a igualar el marcador y revertir la dinámica de un partido que volvía a ser de dominio celeste y blanco.

Y no tardó mucho en volver a golpear. Tsygankov que había entrado pocos minutos antes, aprovechó otra jugada por banda, esta vez por la derecha, que nuevamente Dovbyk decantó con un toque sutil para que su compatriota materializara el tanto que volvía a dar la vuelta al marcador.

Con diez minutos más el descuento por delante el Girona debía resistir los envites de los navarros, que intentaron romper en pedazos la gesta de un Girona que supo aguantar y rematar la machada con el cuarto gol. Portu la ponía y Aleix García remataba su enésima actuación estelar para sentenciar la décima victoria de la temporada en doce partidos.

Míchel explicaba que si el equipo era capaz de sumar cuatro de los seis puntos entre las visitas a Pamplona y Vallecas, el equipo se podría empezar a creer el sueño de la Champions. De momento, son tres de tres. Y tres puntos que saben a más que una sola victoria.

El Girona venció en Pamplona con una nueva exhibición de lo que es. El líder de la Primera División.