Aaron Carter: de ser estrella del pop a la lucha contra sus adicciones

Aaron Carter murió ayer, 5 de noviembre a los 34 años. Fue una de esas personas que han estado vinculadas al mundo del espectáculo desde que eran pequeños, y llevaban más de un millón de álbumes vendidos antes de cumplir los 10 años de edad. Oriundo del Estado de Florida, se convirtió en una de esas estrellas adolescentes, auspiciada por el éxito de su hermano Nick Carter quién había arrasado también en los BackStreet Boys.

Del mundo del pop dio el salto a Nickelodeon con grandes series como "Lizzie McGuire" o la mítica "Sabrina, cosas de brujas". Más tarde aparecería en "Bailando con las estrellas" e incluso en otros programas en los que se podía ver su talento.

Sin embargo, una tumultuosa relación y la fama desde la juventud le hicieron caer en las drogas, volviéndose peligroso e incluso llegando a ser detenido por conducir bajo la influencia de algunas de estas drogas. Llegó hasta el punto en el que acabó emitiendo en webcams para adultos, aunque nunca emitió contenido explícito.

Desafortunadamente, las labores de desintoxicación a las que se sometió en varias ocasiones no fueron suficientes para hacer frente a sus adicciones y problemas con el alcohol.