La sorprendente conexión de Bellingham con el Badajoz

Jude Bellingham ha caído de pie en el Santiago Bernabéu. El inglés no entiende de tiempos de adaptación, ni a LaLiga EA Sports ni a una Champions League en la que se volvió a estrenar marcando, como las dos anteriores con el Borussia Dortmund. Seis goles en seis partidos lleva el inglés desde que aterrizó este verano en el Real Madrid. El centrocampista solo se quedó sin marcar el pasado domingo contra la Real Sociedad, y todo el mundo sabe ya que se trata del gran fichaje de LaLiga esta temporada. Lo que seguro muchos no saben es que su descubridor vive en Badajoz, entrenó y jugó en el conjunto pacense, y todavía es socio del club, hablamos de Francisco Herrera Lorenzo.

Herrera se retiró como futbolista en el Badajoz en 1986, tras más de seis años en el club, al que después entrenó en una primera etapa entre 1991 y 1993 y más tarde en 1995, estando muy cerca de volver al banquillo pacense en 2021. Justo antes de esa opción, el catalán estuvo en Inglaterra, ejerciendo como segundo entrenador de Pep Clotet en Birmingham. Allí Herrera hizo una de las cosas que más le gusta, descubrir nuevos talentos, siendo entonces cuando se cruzó en el camino de Bellingham.

"Había pensado en dejarlo todo, pero me satisfacía volver a Inglaterra», nos cuenta sobre su marcha a Birmingham. Una vez allí dijo a Clotet de ir a ver al segundo equipo y a los juveniles para "ver si algo podía interesar", fue entonces cuando descubrió al talentoso inglés con solo 16 años.

"Un jugador distinto al que subimos en la pretemporada. A medida que pasaban los partidos, el chico iba creciendo de manera que el primer partido de liga en la Segunda División inglesa ya fue titular e hizo gol... Durante el tiempo que yo estuve, él ya se había convertido en el máximo goleador".

Herrera destaca el entorno de Bellingham, muy importante en su carrera. "Estuve varias veces con su familia, una familia fantástica. Me cogieron mucho cariño y estaban agradecidos a mí y al entrenador, que al final es el que lo tenía que poner. A partir de ahí fue un cañón y a final de temporada lo compraron los alemanes (Borussia Dortmund)", explica Herrara.

El técnico catalán siempre ha mirado a la cantera, "a veces ha encontrado algo y a veces no", como él relata, comparando el descubrimiento de Bellingham con el de Iago Aspas en el Celta de Vigo o con el de Óscar de Paula en el Badajoz, a quien subió de juveniles al primer equipo «desde el primer día» y al acabar la temporada se vendió a la Real Sociedad. «Siempre me ha gustado darle la oportunidad a ese tipo de jugadores jóvenes, es el caso de Bellingham, que ahora está explotando. Estoy muy feliz de verle al nivel que lo estoy viendo porque es un chico ejemplar».

Preocupado por el Badajoz

Paco Herrera sigue siendo socio del Badajoz, "como lo ha sido siempre", y acude al Nuevo Vivero cada vez que puede, como hizo la jornada pasada ante el Guadalajara. El catalán está preocupado por el rumbo del equipo y las "muchas dudas que tiene", aunque "no tiene tan mal equipo como la clasificación dice, ni tan bueno como para pensar en estar arriba. Creo que es un equipo para estar en medio de la tabla y espero que a medida que se vaya conjuntando más el equipo lo consiga. No dejo de estar preocupado, como todos los aficionados del Badajoz, por este inicio, pero tengo fe en que le van a dar la vuelta".