La segunda B y Tercera piden explicaciones a la RFEF

Los clubs modestos quieren hablar con Rubiales

Los clubs modestos quieren hablar con Rubiales / EFE

Ramón Fuentes

A la RFEF le ha surgido un nuevo foco de conflicto que se suma al existente con el fútbol femenino o el fútbol sala. Se trata de los clubes de Segunda B y Tercera división, el llamado fútbol modesto, que ha estallado ante la preocupante situación que les avecina por la ausencia de momento de un operador que emita la Copa del Rey. Ayer finalizo el nuevo concurso abierto por la RFEF para recibir ofertas.

Hasta ahora la RFEF, y desde la puesta en marcha Del Real Decreto de Venta Centralizada, venían percibiendo por este concepto un 17 millones se euros de la venta total de estos derechos gestionados por la liga(1700 millones). Corresponde al 1% de los ingresos totales que el propio Real Decretó fija que deben repartirse entre los clubes que participan en esta competición.

Pero como ya expusimos en SPORT, la RFEF es quien explota ahora esos derechos lo que implica un escenario radicalmente distinto. Por un lado esta situación de vacío de momento en cuanto al operador. Y por otro, y como consecuencia, que aún no saben cuantas cantidades van a percibir. Pero no será nunca más del 10% de la venta total de los derechos. Considerando que la RFEF, en el mejor de los escenarios está pidiendo 45 millones de euros, serían 4,5 a repartir entre los clubes. Es decir cuatro veces menos de lo que venían percibiendo hasta ahora.

Esto ha provocado un enfado mayúsculo de todo el fútbol modesto hasta el punto que la RFEF se ha visto obligada a convocar una reunión de urgencia para este lunes 28 de octubre en la Ciudad del Fútbol. Convocatoria hecha mediante circular con el título de “Situación económica y organizativa de la Segunda división B y Tercera” y anunciando el propio Luis Rubiales, presidente de la RFEF, el mayor reparto económico de la historia para el fútbol no profesional.Pero este vacío en los ingresos de Copa no es el único punto de conflicto.

A esto se suma los derechos de televisión de estas dos categorías. Como ya expusimos en SPORT, la RFEF desde esta temporada ha asumido todas la capacidad ”para gestionar en exclusiva los derechos televisivos de todos estos clubes”. Textualmente las bases de competición dicen lo siguiente:”la RFEF es titular de los derechos que emanan de competiciones oficiales de ámbito estatal, por lo que la transmisión televisada de partidos, ya sea en directo o en diferido precisará de la autorización de la RFEF”. Un control absoluto que queda aún más patente en el siguiente texto: “dada la titularidad exclusiva...los diamantes (provenientes) de los partidos de los partidos de la Campeonatos oficiales de Segunda B y Tercera...corresponden a aquella, incluidos los derivados de la retransmisión en directo o diferido, totales o parciales, sin que por ello los clubes puedan arrogarse tal titularidad ni, en consecuencia, cederlos, venderlos o traspasarlos, salvo expresa autorización federativa” Hasta el punto, como ya contamos en su momento, que quien no asuma esta cesión de derechos, implica la amenaza de ser expulsado de la competición tanto esta temporada como la próxima edición del campeonato: “el incumplimiento de esta obligación determinará para el club responsable su exclusión inmediata de la Competición, así como su no participación en la siguiente edición del mismo en la que hubiera adquirido el derecho deportivo a ello. Así mismo de la subvención que le pueda corresponder”.  Derechos que inicialmente son de los clubes.

Y luego está el control económico que la propia RFEF ha incluido en las normas de competición de la Segunda B, Tercera y liga femenina para esta temporada 2019-2020. Control económico que, como ya informamos en el diario SPORT, se dividía en cuatro fechas a lo largo de la temporada. Una primera fecha que concluyó  el próximo 20 de septiembre en donde, entre otras cosas, deben presentar el balance de las cuentas de la temporada pasada, proyecto de presupuesto para la actual, deudas pendientes a 30 de junio y los contratos de la plantilla y entrenador. Los siguientes controles se ejecutan el 31 de diciembre del 2019 y 28 de febrero del 2020. Al margen, y con carácter anual o trimestral según corresponda, deben acreditar la documentación de la liquidación de las cotizaciones sociales y las declaraciones de IVA e IRPF.  Control económico que esta temporada 2019-2020 arranca con una recogida de información y evaluación del estado económico financiero de las competiciones no profesionales (Segunda B, Tercera y Fútbol femenino). Etapa que durará tres temporadas deportivas. Será a partir de entonces cuando se establecerían posibles sanciones.

Pues bajo este escenario tendrá lugar este encuentro que afecta a 80 clubes de Segunda B y 364 clubes en Tercera división. En total 444 equipos que representan 29 votos en la Asamblea de la RFEF. Un porcentaje muy importante pensando en el proceso electoral del próximo año tanto a la Asamblea como a la presidencia de la RFEF.