Óscar García: "Cuando estoy en apuros pienso en lo que haría Cruyff"

Antonio Torres del Cerro

Cruyffista hasta la médula, Óscar García Junyent (Sabadell, 1973) debuta este domingo en el banquillo del histórico Stade de Reims de la Ligue 1 francesa, el octavo equipo que dirige y en el que la figura de su mentor holandés le resulta imprescindible: "Cuando hay algún problema, pienso en qué haría él".

"Fue gracias a él (Johan Cruyff) que debuté en primera, gracias a él me hice entrenador, me enseñó muchísimo, tuvimos una muy buena relación después (...) El fútbol ha evolucionado, pero las bases me las dio él", cuenta en una entrevista con EFE el ex del Barcelona, que debutó como jugador a las órdenes del maestro holandés en 1993.

Han pasado casi 20 años desde entonces y la huella de Cruyff, fallecido en 2016, es profunda. El fútbol de hoy, más físico y más intenso, no es el mismo que el de los 90, pero la calidad técnica, la posesión del balón y la vocación ofensiva siguen siendo las armas innegociables de García Junyent, antiguo preparador del Celta de Vigo.

"El fútbol lo jugamos para el espectador y el aficionado quiere lógicamente ganar y creo que les importa el cómo y disfrutar de su equipo", defiende.

Que el rocoso Chelsea sea el último campeón de Europa o la hercúlea Francia la última ganadora del mundial de 2018 no quiere decir que el "tiki-taka" haya caducado.

"El (Manchester) City ha ganado la Liga jugando así y ha llegado a la final de Champions, hay veces que un partido no puede determinar la tendencia de todo un año", considera.

Y agrega: "Uno de los mejores jugadores de la selección española en la Eurocopa ha sido Pedri y es todo lo opuesto" a los jugadores físicos. Precisamente "muchos Pedris" es lo que busca en su plantilla el nuevo entrenador del Reims, un club de solera vencedor de la Liga francesa en seis ocasiones (la última en 1962) y subcampeón de Europa en dos ocasiones (1958 y 1959, ambas perdidas ante el Real Madrid). En aquellos años dorados, militaron jugadores como Just Fontaine y Raymond Kopa.

"Tengo un equipo de gente joven con mucho margen de progresión. Cuando viene un entrenador nuevo y quiere cambiar mucho la forma de jugar de años anteriores necesita un poco de tiempo, estamos trabajando en ello", señaló.

Para el técnico español, la idea es "afianzar el equipo en primera y poco a poco ir subiendo para mirar más arriba que hacia abajo". El Reims, cuya sede está en la pequeña ciudad homónima situada a unos 150 kilómetros de París y famosa por su catedral, terminó 14º en el último campeonato.

Octavo equipo en seis países

Cuando reciba el próximo domingo 8 al Niza, García Junyent dirigirá oficialmente su octavo vestuario profesional en seis países diferentes desde que colgó las botas en 2005: el israelí Maccabi Tel Aviv, los británicos Brighton & Hove Albion y Watford, el austríaco Red Bull Salzburgo, el Saint-Étienne francés, el Olympiacos griego y el español Celta de Vigo (su club hasta noviembre de 2020).

Las tres últimas experiencias no duraron más de un año y registraron algunos convulsos episodios: resultó herido en febrero de 2018 en Grecia por el lanzamiento de un objeto desde la grada y dimitió en noviembre de 2017 del Saint-Étienne en desacuerdo con la dirección.

"Fue una experiencia muy buena la de entrenar a un club histórico como el Saint-Étienne, con una afición increíble, pero no pude estar todo el tiempo que me hubiese gustado por razones diversas", dice sobre su primer paso en la Liga francesa.

La crisis que atraviesa el campeonato por la bajada de ingresos de televisión desde que se marchó Mediapro complica las cosas para entidades como el Reims, asume García Junyent. Los clubes reciben menos dinero y tienen que vender y comprar barato.

"Hay que adaptarse a las circunstancias y trabajar con eso", señala con resignación. Como también se resigna al poderío del París Saint-Germain (PSG). "Aunque el PSG jugase con todos los suplentes, podría luchar por la Liga igualmente. En Francia hay muy buenos equipos, pero no con una plantilla tan grande como la del PSG", sostiene.