El Barça, a por su quinta Champions con Rivillos y Rómulo como rivales

El Barça empezó la Final Four exactamente igual que la cerró en su última presencia: con una victoria frente al Sporting de Portugal de Nuno Dias. Si hace dos años en Riga sirvió para conquistar su cuarta Champions, el viernes supuso el billete para la final de este domingo frente al campeón Mallorca Palma Futsal.

Sergio Lozano, a un partido de la gloria absoluta

Lejos de la exhibición de hace dos años en Riga (4-0), el viernes tocó sufrir hasta el final (5-4) frente a un equipazo que cuenta con dos títulos continentales. Tanto o más tuvo que bregar el cuadro balear para eliminar a un Benfica que llevó siempre la iniciativa y pagó cara la ramplonería de su técnico Mário Silva para caer en los penaltis.

Las bajas

Uno de los aspectos importantes de la final serán los problemas de efectivos de ambos equipos con tres bajas de calado que limitan los recursos y obligan a los jugadores determinantes a acumular más minutos de los idóneos.

El Barça no puede contar en Ereván con tres jugadores tan importantes como Dyego, Sergio González y un Álex Yepes que llegó para suplir a Ferrao y apenas jugó un mes antes de lesionarse de mucha gravedad.

El problema añadido de los azulgranas es que otros tres jugadores acaban de salir del dique seco y no están en su forma ideal como es el caso del capitán Sergio Lozano, de Pito y, sobre todo, de un Ferrao que llevaba KO desde agosto. El cuarto sería Adolfo, pero el colomense es un prodigio físico y recupera la forma como por arte de magia.

En este sentido, la espectacular irrupción del joven Mamadou Touré con una actuación prodigiosa en la semifinal añade una pieza en la rotación. Recién renovado con todo merecimiento, el galo empieza a ser fundamental en el primer equipo.

Palma también llega lastrado por la enfermería. El 'mago' iraní Hossein Tayebi no se ha recuperado de sus problemas físicos y su baja se una a la de Fabinho y del expulsado en semifinales Ernesto, pero recupera a Bruno Gomes tras cumplir sanción contra el Benfica. También está Moslem tras colaborar a la clasificación mundialista de Irán, país al que regresó Salar Aghapour por motivos personales a finales de marzo (otra ausencia).

Dos exazulgranas

El Barça tendrá enfrente a dos jugadores que sufrieron sendas lesiones graves en el Barça de Andreu Plaza. Mario Rivillos llegó en 2017 como fichaje de consenso procedente de Inter, donde había logrado cuatro Ligas y la Champions 2016-17 a las órdenes de Jesús Velasco. 

Sin embargo, una grave lesión de rodilla en el último partido de la final liguera el 19 de junio de 2018 lo tuvo nueve meses de baja. También colaboró a la Champions azulgrana 2019-20, pero al aplazarse la Final Four por el covid hasta octubre de 2020, ahí ya era jugador del Levante.

El rusobrasileño Rómulo llegó en 2016 al Barça como uno de los mejores cierres del mundo, pero en enero de 2017 se lesionó de gravedad con Rusia y terminó dejando el club sin volver a jugar y después de algún problema extradeportivo. Con 37 años su rol es menor, pero su disparo sigue siendo letal.

Ambición y optimismo

Este sábado ha tenido lugar la previa de la final con los dos entrenadores y los dos capitanes de los finalistas, Jesús Velasco y Sergio Lozano por parte blaugrana y Antonio Vadillo y Carlos Barrón por los actuales campeones en lo que fue el primer título de la historia del club al acceder al torneo como subcampeones ligueros hace dos años. Meses después alzó también la Intercontinental. 

"Será un partido muy duro y se llevará el título el que consiga ser más fiel a su estilo", destacó Velasco. "Somos los dos últimos campeones de Europa y estamos aquí por méritos propios. Lo daremos todo para ganar y nos lo merecemos por el año tan duro que llevamos", recalcó Lozano, quien podría hacer historia con su quinta Champions.