Dzeko y Barella cargan de razones al Inter para creer en el 'sorpasso'

Con goles del bosnio y el sardo, el cuadro 'nerazzurro' logró un triunfo plácido ante el Verona (2-0)

Los de Simone Inzaghi se sitúan temporalmente a un punto del Milan, líder de la Serie A

El delantero del Inter, Edin Dzeko, celebra un gol en el Giuseppe Meazza

El delantero del Inter, Edin Dzeko, celebra un gol en el Giuseppe Meazza / EFE

X. Serrano

La sufrida victoria en el 'Derby d'Italia' contra la Juventus ha revitalizado al Inter, que este sábado derrotó con facilidad al Hellas Verona merced a un primer acto arrollador (2-0). Los goles de Dzeko y Barella antes del descanso supieron a poco dada la superioridad de los 'nerazzurri', que tras la pausa protegieron el botín ante su inofensivo rival.

Inter-Verona

Serie A

2
0
Alineaciones
Inter
Handanovic; Skriniar, De Vrij (D'Ambrosio, 46'), Dimarco (Bastoni, 65'); Dumfries, Barella (Vidal, 65'), Brozovic, Çalhanoglu (Gagliardini, 84'), Perisic; Correa (Gosens, 59') y Dzeko.
Hellas Verona
Montipò; Casale, Gunter, Ceccherini (Sutalo, 82'); Faraoni (Depaoli, 61'), Tameze, Ilic, Lazovic (Cancellieri, 82'); Bessa (Lasagna, 61'), Caprari; y Simeone.

Con esta victoria, el conjunto dirigido por Simone Inzaghi, con un partido pendiente, iguala en la segunda posición al Nápoles y se sitúa a un punto del Milan. Los 'partenopei' reciben este domingo la visita de la Fiorentina y los 'rossoneri' se desplazan a Turín para medirse al 'Toro'.

Tras un mes y medio para olvidar, en el que sumó 7 de 21 puntos posibles, parece que el Inter ha reaccionado. Al triunfo del pasado domingo ante la Juve, inmerecido pero revitalizante, ha seguido una victoria incontestable y que deja sensaciones muy distintas. Porque este sábado el cuadro de Inzaghi fue ambicioso, saltó al campo decidido a llevarse el triunfo e impuso su energía ante un Hellas Verona sin nada en juego.

Con todo, el cuadro dirigido por Igor Tudor es reconocido por ser un rival correoso. De ahí el mérito de la puesta en escena 'nerazzurra', que no dejó a su oponente cruzar el ecuador del campo y lo acribilló en transiciones fugaces. Perisic, secundado por Dimarco, fue un puñal en la banda izquierda.

En sus botas nació el 1-0 tras interceptar un pase defectuoso de Bessa con el carril liberado ante sí. El croata despegó, levantó la cabeza y cruzó el balón al lado opuesto para la llegada de Barella, que con un remate dificilísimo, a bote pronto y con el exterior, superó a Montipò.

El portero del Verona tuvo que lucirse a disparos de Correa y Dzeko para posponer el 2-0, obra del delantero bosnio sobre la media hora de juego. Perisic se apuntó una nueva asistencia, esta vez peinando en el primero poste un saque de esquina que el espigado delantero martilleó en el segundo palo.

Solo Gio Simeone, con arranques individuales a base de potencia física, inquietó mínimamente a la zaga interista. Handanovic tuvo que salir rápido para tapar con el cuerpo un remate del argentino que, demasiado solo frente a los tres centrales 'nerazzurri', se marchó de vacío.

Tras el intermedio, el Inter adoptó una a actitud más expectante. Simeone, con un chut entrado que Handanovic paró en dos tiempos, y el recién incorporado Lasagna, con un zapatazo alto, trataron sin éxito de dañar al vigente campeón del 'calcio', que gozó de las ocasiones más claras de la segunda mitad al contraataque. La mejor, un tiro a bocajarro de D'Ambrosio que Montipò desvió al palo. Pero el marcador, corto visto lo visto, no se movió.