Marc Jurado, el niño de Can Rull

Jurado tiene el don de aparecer en los momentos que el equipo más lo necesita

Marc junto a sus padres Pedro y Paqui

Marc junto a sus padres Pedro y Paqui / sport

Albert Rogé

Albert Rogé

Así se le conoce a pesar de llevar media vida en el Barça. Marc Jurado no olvida sus raíces y está eternamente agradecido a lo que consiguió durante su etapa en el Can Rull. Allí empezó a formarse como futbolista cuando solo tenía cuatro años. No tenía la edad suficiente para entrenar y por ello lo hacía con jugadores mayores. Él estaba enamorado del fútbol y lo practicaba en todas partes. Hasta en el bar. Allí cuando sus padres estaban tomando algo, Marc se esperaba a que entrara algún cliente para, con una cajetilla de tabaco o lo que encontraba por el suelo, hacerle un caño. Los clientes quedaban alucinados y la sonrisa delataba al pequeño Marc

En el Can Rull estuvo tres temporadas. Lucía el número siete y marcaba muchos goles. En su familia siempre ha gustado el Atlético y por ello a Marc lo conocían como Forlán, por el delantero uruguayo que destacaba con los colchoneros.

El Barça empezó a seguir a Marc por medio del ojeador Nico y en ese entonces casi se pasa a balonmano. Quería ser portero. Por suerte siguió en el fútbol. Cuando los azulgranas tomaron la decisión se la comunicaron a sus padres. Estos se lo dijeron a Marc y el pequeño sorprendió diciendo que no quería ir al Barça. Prefería quedarse en el Can Rull para seguir jugando con sus amigos de toda la vida. Con el paso de los días fue asimilando la oportunidad que tenía por delante y aceptó. 

En la actualidad Marc está jugando en el Infantil A. En ese equipo están Diego Almeida y Pablo López. Ambos empezaron con Jurado en su etapa como prebenjamines y aún siguen compartiendo equipo. Dentro del terreno de juego, Marc destaca por tener el don de aparecer en los momentos en el que el equipo más lo necesita. Muchos se acordarán de la final alevín del MIC de hace tres años entre el FC Barcelona y el Real Madrid. Allí el conjunto azulgrana dio una exhibición de fútbol y Marc Jurado fue el autor del primer gol con un soberbio cabezazo. 

Partiendo desde el lateral, es un filón por la banda derecha. Puede adentrarse para dentro o salir por fuera. En las jugadas a balón parado es una de las armas de su equipo y poco a poco se va afianzando en el fútbol once. 

En el aspecto personal, Marc es un chico muy normal. Tiene un humor muy bueno y siempre está con la sonrisa en la boca. De eso ha aprendido de sus padres. Si vas a ver a Jurado, no te será difícil saber quién es su madre. Paqui es una aficionada de las que se hacen querer y no duda en animar siempre a sus jugadores. Pedro es más calmado y siempre sabe dar el mejor consejo a su hijo. Como hobbies le encanta jugar al pádel y disputar Mundialitos, una modalidad de fútbol, con sus amigos. En definitiva, el deporte le hace feliz y eso es lo más importante.