Adrián Guerrero, el artista tranquilo de La Masia

Los artistas suelen ser personas diferentes a la media, muy inquietos, rebeldes, contestatarios....Suelen ser individuos que llaman la atención con una habilidad muy especial que les hace sobresalir de la mediocridad. Adrián Guerrero es un artista atípico. El futbolista malagueño del Cadete A del Barça es un chico muy tímido y reservado. Una persona muy discreta a la que no le gusta destacar y que pasa desapercibido en La Masia y en el vestuario de su equipo. Con el balón, es todo un artista.

Guille Fernández: radiografía del nuevo crack de la Masia

En los entrenos y en los partidos llama la atención un talento especial para controlar, mimar, pasar y golpear a la pelota. Un jugador con un carácter tan tranquilo y una sangre fría tan evidente no lo tendrá fácil para poder triunfar en un mundo del fútbol que exige el máximo rendimiento de los jugadores en todas las facetas.

Piero Ferrari, el bólido por explotar de La Masia

Su manera de ser provoca que su talento indiscutible aparezca de manera más inconstante de lo deseado Adrián es un maestro del regate y del pase, nadie como él sabe superar rivales con la gambeta y las paredes. Llegó del Málaga hace tres temporadas y en su primer equipo, el infantil A, jugó como interior y lo tuvo complicado ya que competía con jugadores del nivel de Guille Fernández, Pedro Rodríguez o Adam Argemí.

Buscando la regularidad

Su temperamento excesivamente pausado no ayudó a que se adaptara rápido, pero poco a poco ha ido convenciéndose de que su éxito en el Barça pasa por convertirse en un jugador más intenso. La evolución en este sentido es positiva. Después de un primer año irregular, la temporada pasada dio un paso adelante con el Cadete B. Pol Planas lo situó de falso extremo izquierdo y en esta demarcación logró rendir mejor. En esta posición tiene detalles similares a Joao Félix, jugador al que Adrián admira por su gran técnica. La mejor versión de Adri, como en el caso del portugués, es excelente.

Cualidades innatas

Su último pase a los delanteros es brillante y su facilidad goleadora es notable. Al gol llega gracias a su técnica depurada para definir y gracias a su sangre fría en el área. En este aspecto su carácter tranquilo le ayuda. Esta temporada ha marcado 12 goles actuando en la mayoría de partidos como falso nueve. En las semifinales y final del Campeonato de catalunya podrá seguir aumentando esta cifra.

Fintar y regatear forma parte de su repertorio en el que no falta el cambio de ritmo para engañar a los rivales. Sus técnicos han trabajado a fondo con él para que sus apariciones en ataque sean más constantes y para que en defensa muestre un mayor espíritu de sacrificio.

Quim Junyent, el interior más clásico de La Masia, brilla con la Sub-17

Evolución positiva

En este sentido tanto David Sánchez, Pol Planas como Arnau Blanco han logrado que el jugador poco implicado de sus inicios se haya transformado en un futbolista con mucho mayor ritmo defensivo. Sus habilidades innatas son asombrosas. Guerrero luce por como toca el balón y como interpreta los espacios libres. Adrián está lejos de ser un chico extrovertido o con madera de líder pero aunque siga siendo tímido se le advierte una evolución madurativa importante. Si es capaz de seguir mejorando su actitud e intensidad en el campo en su etapa de juvenil , sus dotes de artista le pueden hacer llegar muy lejos en el mundo del fútbol.