Si ves esto en la remolacha, tírala de inmediato

La remolacha es una planta comestible que pertenece a la familia de las Amaranthaceae. Es muy conocida por su raíz bulbosa y carnosa, utilizada como alimento en muchísimas culturas; las hojas también son comestibles y se utilizan como parte de las ensaladas al ser ricas en ácido fólico, vitamina C y hierro. Ahora bien... ¿Sabes cómo detectar si una remolacha se encuentra en mal estado?

Las cuatro claves para no consumir remolacha en mal estado

1. Inspección: Examina visualmente las remolachas para detectar cualquier signo de deterioro. Busca señales de moho, manchas blandas, decoloración o mal olor. Si las remolachas presentan alguno de estos síntomas, es probable que estén en mal estado.
2. Descarte: Si las remolachas están en mal estado, debes desecharlas. No intentes consumirlas ni utilizarlas en preparaciones culinarias, ya que podrían estar contaminadas o causar enfermedades alimentarias.
3. Compostaje: Si tienes acceso a un sistema de compostaje, puedes compostar las remolachas en mal estado en lugar de desecharlas en la basura. El compostaje adecuado ayuda a reducir el desperdicio de alimentos y contribuye a la fertilidad del suelo. El compostaje es la degradación de la materia orgánica mediante su oxidación y la acción de diversos microorganismos presentes en los propios residuos.
4. Limpieza: Si las remolachas en mal estado han contaminado otras verduras en tu despensa o refrigerador, asegúrate de limpiar y desinfectar adecuadamente las áreas afectadas para prevenir la propagación de bacterias u hongos.

De esta forma, estarás seguro de estar consumiendo remolacha en buen estado. Se trata de un alimento rico en vitaminas que no debería faltar en tu dieta, pero un paso en falso y puedes sufrir enfermedades de carácter leve (o grave) en función a la salud de cada persona.