Última hora sobre las monjas clarisas de Belorado y Orduña

Las monjas querían abandonar la Iglesia Católica al sentirse 'perseguidas'

Las monjas clarisas del Monasterio de Belorado, en una imagen que han difundido en las redes sociales.

Las monjas clarisas del Monasterio de Belorado, en una imagen que han difundido en las redes sociales. / Lucía Feijoo Viera

Las monjas clarisas de los monasterios de Belorado y Orduña han informado a la Guardia Civil ante la visita de una comitiva enviada por la Santa Sede, rechazando su entrada y solicitando su retirada.

La comitiva, compuesta por la secretaria de la Federación de Clarisas Nuestra Señora de Aránzazu, Sor Carmen Ruiz; el apoderado del Comisario Pontificio, Don Rodrigo Sáiz; y el notario del Tribunal Eclesiástico, Don Carlos Azcona, fue recibida con hostilidad, según un comunicado del Arzobispado de Burgos.

La exabadesa sor Isabel, a través de sor Belén, expresó que, salvo el notario, los demás miembros de la comitiva no eran bienvenidos y que deberían abandonar el monasterio, avisando a la Guardia Civil en caso de negativa. El notario entregó los requerimientos civiles y canónicos pertinentes mientras los otros miembros esperaban fuera, siendo posteriormente entrevistados por una patrulla de la Guardia Civil.

El Arzobispado de Burgos ha calificado estos hechos como un gesto de hostilidad, evidenciando la falta de voluntad de la comunidad religiosa para dialogar con la Santa Sede. A pesar de esto, el Comisario Pontificio mantiene su disposición de encontrar una solución adecuada y tender puentes de comunicación.

Una historia que comenzó cuando estas monjas clarisas de Belorado y Orduña anunciaron su abandono de la Iglesia Católica por la "persecución" que presuntamente estaban sufriendo.