Sidney prohibirá la venta de vehículos diésel y gasolina en 5 años

La contaminación es uno de los principales problemas al que se enfrentan las grandes ciudades de todo el mundo. En Sidney, por ejemplo, las principales fuentes de contaminación son el transporte (36%) y los edificios (31%), por lo que el gobierno local se ha propuesto acabar con el primer factor a través de una ambiciosa medida: poner fin a la venta de vehículos diésel y gasolina en un plazo de 5 años.

Sidney, a través de un informe, tiene previsto reducir los vehículos de combustibles, primero limitando su venta, y a corto y medio plazo, prohibiendo su circulación. Junto a este plan, se incrementará el uso del transporte público, de la bicicleta, de los paseos a pie y de los e-scooters y taxis eléctricos. Es decir, cambiar el modelo de movilidad actual, por uno mucho más sostenible.

El objetivo de las autoridades estatales de Australia es que los vehículos eléctricos supongan el 50% de las ventas en 2023, algo que desde el Comittee for Sidney consideran insuficiente: "nuestro modelo de Transición Cero Neta Acelerada muestra que necesitamos un aumento mucho más rápido: todos los autos nuevos deben ser eléctricos para 2027".