Cada vez más gente es fiel a las claves del estoicismo: haz esto para ser feliz y vivir más

Esta filosofía puede hacer que encontremos maneras de enfocar los problemas de una manera más pragmática

España, el séptimo país más feliz del mundo

España, el séptimo país más feliz del mundo / Pixabay

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El estoicismo se define como el arte de dominar el discurso interior, una práctica que invita a separar lo que está bajo nuestro control de lo que no lo está. Este enfoque permite alcanzar la felicidad, el principal objetivo del ser humano. La metodología estoica, aunque no es universalmente eficaz, es aconsejada por aquellos que la siguen, quienes señalan tres pasos clave para lograr una felicidad plena.

El control de las cosas es fundamental en el método estoico. Es crucial separar lo que está a nuestro alcance de lo que no depende de nosotros para establecer objetivos claros y evitar frustraciones innecesarias. Esta distinción es esencial para evitar la decepción y mantenernos enfocados en lo que realmente podemos influir.

Una vez que se ha hecho esta separación, actuar en consecuencia es absolutamente vital. El estoicismo nos insta a centrarnos en lo que podemos controlar y a aceptar con serenidad lo que no podemos cambiar. Este principio se resume en el lema: "Hacer lo mejor que puedes, con lo que tienes y allá donde estés". Esta perspectiva pragmática y serena ayuda a reducir el estrés y facilita el camino hacia la felicidad.

Para ser feliz, según el estoicismo, se deben seguir tres mandatos clave: Primero, alcanzar la libertad reduciendo los deseos al mínimo, como aconsejaba Epicteto. Segundo, decir adiós a las preocupaciones, entendiendo que la ansiedad a menudo proviene de nuestra percepción de las cosas más que de las cosas mismas. Finalmente, aceptar lo que viene sin luchar contra ello, lo que implica aprender de nuestros errores y ajustar nuestras actitudes para responder positivamente en el futuro. Estos principios guían a los practicantes del estoicismo hacia una vida más equilibrada y feliz.