Así es la nieve rosa: puede parecer bonita pero es un peligro medioambiental

Esta coloración se debe a la presencia de una microalga conocida como 'Chlamydomonas nivalis'

Dos cachorros de oso polar jugando en la nieve.

Dos cachorros de oso polar jugando en la nieve. / Unsplash

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La nieve rosa es un fenómeno que se lleva conociendo desde hace mucho tiempo, sin embargo no fue hasta el siglo XIX que se descubrió la razón tras este extraño color. Y es que, la comunidad científica descubrió que el tono rojizo tenía que ver con la aparición de una alga verde llamada Chlamydomonas nivalis. Esta alga hace que la nieve se tiña de ese tono rosado y prolifera en zonas de bajas temperaturas.

Sin embargo, el tinte rosa o rojo que produce no es la única consecuencia de su aparición en la nieve. Y es que, un estudio de la revista Nature reveló que esta microalga produce que la nieve se derrita más rápido. Esto se debe a que el pigmento que producen y que tinta la nieve hace que la nieve pierda parte de su capacidad para reflejar el calor que proviene de los rayos solares.

“La nieve roja, un hábitat de algas común que florece después del inicio del derretimiento, juega un papel crucial en la disminución del albedo”, explicaban en este estudio de 2016. Esta reducción de la capacidad de absorber el calor puede tener graves consecuencias en los ecosistemas ya que el hielo desnudo queda expuesto antes y en una superficie mayor de lo normal.

Para avanzar en la comprensión de la vida y proliferación de estas microalgas se ha creado ALPALGA, un proyecto que reúne a biólogos, ecólogos y glaciólogos con el objetivo de investigar las especies de algas presentes en la nieve. Este proyecto busca esclarecer cómo estas algas sobreviven en condiciones extremas y estudiar los efectos de sus floraciones en el deshielo y el impacto del calentamiento global en estos procesos.