Lavado de sangre contra la COVID-19: qué es y por qué es contraproducente

Suiza, Alemania o Chipre, entre los países que ofrecen tratamientos de filtrado de la sangre

No hay evidencia científica de su utilidad, y suponen un gran desembolso

Lavado de sangre contra la COVID-19: qué es y por qué es contraproducente

Lavado de sangre contra la COVID-19: qué es y por qué es contraproducente / Google

D. Cruz (@DCruzMarketing)

El lavado de sangre (o filtrado de sangre) es una técnica que se está poniendo de moda, de forma alarmante, en países como Chipre, Suiza o Alemania, y consiste en pasar la sangre a través de una máquina para separar cada uno de sus componentes, extrayendo solo aquellos que se necesitan (glóbulos rojos, plaquetas) y devolviendo el resto al cuerpo. Si bien se utiliza en múltiples enfermedades hematológicas y digestivas, su uso en COVID persistente no queda demostrado.

El COVID persistente es la presencia de síntomas tras haber pasado la enfermedad, los cuales pueden durar meses y años sin saberse todavía muy bien la razón. Los expertos cuestionan si el lavado de sangre es de utilidad para las personas que tengan esta patología, porque además de ser un enorme desembolso económico, no ha quedado demostrada su utilidad.

Por ejemplo, tal y cómo recoge este artículo de El Confidencial, pacientes que viajaron a una clínica de Chipre (Long Covid Center) volvieron a casa con los mismos síntomas, pero con 50.000 euros menos:

  • 6 sesiones de aféresis (1.685 euros cada una).
  • 9 sesiones de oxigenoterapia hiperbárica (150 euros cada una).
  • Cóctel intravenoso de vitaminas e inyección de vitamina D (50 euros).

Una de las afectadas por este presunto engaño asegura que "estaba un poco dudosa, sobre todo con el tratamiento adicional, pero me dije que, si estaba allí, haría cualquier cosa". De ahí que los científicos pidan a la ciudadanía no acudir a estos centros.