La juez desdice a Clara Chía y elimina la orden de alejamiento impuesta a un paparazzi

No son buenas noticias para Clara Chía, el Juzgado de Instrucción Nº6 de Barcelona ha dado por finalizado el plazo de alejamiento que debía cumpliar el fotógrafo Jordi Martín desde el pasado 8 de junio. Aunque la novia de Piqué solicitó el 7 de septiembre una prórroga, ni el ministerio público ni la juez encuentran motivos suficientes para ello.

El destino que han elegido Piqué y Clara Chía para sus vacaciones este verano

El fotógrafo Jordi Martín podrá acercarse o comunicarse con la joven una vez levantada la orden. El pasado 10 de mayo, Gerard Piqué y Clara Chía denunciaron al fotógrafo por acoso en comisaría y la problemática pasó al juzgado que recibió 36 folios presentados por la pareja donde habían noticias, reportajes gráficos, post en Instagram e intervenciones en televisión de Jordi refiriéndose a ellos.

Piqué y Clara aseguraron haberse visto forzados a cambiar sus rutinas para evitar la sombra del paparazzi y además dijeron que se sentían inseguros, angustiados y que había alterado su forma de vida.

El 7 de junio ratificaron ante la juez la denuncia por acoso pero Piqué se retiró de la misma pero Clara la mantuvo: la petición de alejamiento fue rebajada de 3.000 a 1.000 metros y su señoría dictó auto de alejamiento por tres meses para Martín.

Los padecimientos de Clara han experimentado una aparente mejora y Martín ha cumplido

El abogado de Clara presentó un informe forense ante la fiscalía sosteniendo que la joven podría sufrir una “reagudización de la sintomatología si se vuelve a producir una exposición a esta situación”.

La fiscal ha respondido que este argumento choca con el principio de seguridad jurídica y que se trata de una especulación a futuro por lo tanto no es aplicable para mermar los derechos personales del periodista.

El juzgado ha tenido en cuenta que según el informe forense, los padecimientos de Clara Chía han experimentado una aparente mejora y Martín no ha incumplido con el auto que le ordenaba no acercarse a ella, de modo que la instrucción ha llegado a su fin.