Una investigación de Harvard revela las cinco superconservas de pescado que protegen y vigorizan tu corazón

Son tan saludables debido a su alto contenido en proteínas, hierro, zinc, vitamina B12 y ácidos grasos omega-3

Latas de conserva

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Una dieta saludable es fundamental para mantener un corazón sano, y elegir los alimentos adecuados es clave. Según un estudio de la Universidad de Harvard, se recomienda reducir el consumo de carne roja y embutidos, y en su lugar incluir carnes blancas, huevos, avena, legumbres y pescado, especialmente pescado de pequeño tamaño como las sardinas y las anchoas.

Estos alimentos son ricos en proteínas, hierro, zinc, vitamina B12 y ácidos grasos omega-3, beneficiosos para el corazón. Además, se ha observado que su consumo se relaciona con un menor riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes y cáncer en comparación con la carne roja.

A continuación, encontrarás las cinco conservas de pescado que promueven la salud cardiovascular:

  1. Anchoas: Son ricas en ácidos grasos omega-3, proteínas, vitaminas y minerales esenciales para el corazón y el cerebro. Sin embargo, es importante controlar su contenido de sodio, ya que la mayoría de las variedades procesadas suelen tener un alto contenido.
  2. Arenque: Este pez azul es conocido por su alto contenido de ácidos grasos omega-3, proteínas, yodo, potasio, selenio, fósforo y vitaminas B12 y D, lo que lo convierte en una opción beneficiosa para el corazón.
  3. Caballa: Es un pescado económico que es rico en omega-3 y contribuye a disminuir los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre. Su consumo es recomendado para reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y vasculares.
  4. Sardinas: Son un pescado azul muy rico en ácidos grasos omega-3, vitaminas del grupo B, D y E, y proteínas de alto valor biológico. También contienen minerales como fósforo, selenio, yodo, hierro y magnesio.
  5. Almejas: Junto con otros mariscos como las ostras y los mejillones, son buenas fuentes de proteínas y contienen bajos niveles de grasas. Aunque no son tan ricas en omega-3 como los pescados pequeños y grasos, contienen micronutrientes como zinc y vitamina B12.