Gabriela Guillén se harta de Bertín Osborne: 'No me habléis de esta persona'

Gabriela Guillén, en el centro de la tormenta mediática tras el nacimiento de su hijo con Bertín Osborne, ha roto su silencio y expresado su hartazgo ante la prensa. Después de las declaraciones de Osborne sobre su papel como padre, Guillén pidió a los medios que dejen de preguntarle sobre el cantante, subrayando que no responderá más al respecto. Visiblemente afectada, la empresaria salió de su casa con el rostro cubierto y solicitó respeto ante lo que considera un acoso mediático.

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El viernes, tras las controvertidas declaraciones de Osborne, Guillén expresó su malestar y, el sábado, durante un paseo cerca de su hogar, reiteró que no quiere saber nada del artista. Pidió a la prensa que no le hable de él y destacó la importancia de proteger la intimidad de su madre y su hijo, calificándolos como "lo único bueno" que tiene. Además, explicó que el nerviosismo de su madre y el enfrentamiento con la prensa fueron resultado de la presión mediática y destacó su necesidad de tranquilidad para recuperarse de un parto complicado.

Aunque Guillén afirmó encontrarse bien dadas las circunstancias, destacó su falta de descanso y la necesidad de estar tranquila para recuperarse completamente. En medio de la vorágine mediática, la empresaria busca preservar su espacio y privacidad, solicitando un trato respetuoso por parte de los medios.

La situación de Gabriela Guillén refleja el delicado equilibrio entre la vida personal y la intensidad del escrutinio público. Su petición de privacidad y la manifestación de su irritación subrayan los desafíos que enfrentan las figuras públicas en medio de acontecimientos íntimos y mediáticos. Mientras busca recuperarse tras un parto complicado, Guillén destaca la importancia de mantener el respeto hacia su familia.