¿Cómo evitar que el coche falle después del verano?

El aumento de las temperaturas y un mayor uso por las vacaciones causan problemas evitables

El motor es lo principal que hay que cuidar

¿Cómo evitar que el coche falle después del verano?

¿Cómo evitar que el coche falle después del verano? / Google

D. Cruz (@DCruzMarketing)

Es habitual que verano se convierta en la época del año con mayor número de desplazamientos por carretera: a las personas que siguen trabajando día tras día y utilizan su coche para llegar hasta su puesto laboral, se les suman los millones de españoles que marchan a su destino de vacaciones en turismo. Por esta razón, septiembre y octubre son los meses más ajetreados para los talleres. ¿Cómo podemos evitar que nuestro vehículo falle una vez termine el verano?

Lo primero que debemos hacer es revisar el estado de los neumáticos: observar si tienen grietas o cortes, y comprobar si la profundidad del dibujo se sitúa por encima de 1,6 mm (el mínimo exigido para circular según la Dirección General de Tráfico). Revisa también la presión, porque puede que los neumáticos pierdan aire aunque tú no lo detectes a simple vista.

Segundo, comprueba el nivel de los líquidos (aceite, limpiaparabrisas, líquido refrigerante...) y presta atención a la limpieza: es importante limpiar el coche por fuera a presión, haciendo especial hincapié en los bajos, dado que puede haber arena u otras partículas ocultas bajo el chasis.

Y tercero, si escuchas algún ruido extraño en el habitáculo mientras conduces, lleva el coche al taller. Quizás tienes un problema en el motor que, detectado a tiempo, evitará tener una avería mayor a corto o medio plazo.